miércoles, 23 de octubre de 2019

"Nuestro auxilio es el nombre del Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


La elección acertada de la libertad es el bien, y en ello está la propuesta constante y continua de la gracia... La fe está al servicio de esta conquista, y la presencia de Dios, velada pero activa en el tiempo, acerca nuestros pasos a esta luz permitiéndonos acertar al elegir, y hacer opciones que dilatan la vida a nuestro paso, en cada acontecer, ante cualquier situación...

Si nos tocó el alma a su paso, el eco misterioso de su compañía, nos dejará hambrientos de su Presencia, ante cualquier seducción que nos recorte las alas al volar, nos frene el paso hacia el bien, nos enfríe el amor en la entrega gratuita a los demás... Dios se ha fiado de nosotros sembrandonos como semillas en su campo, a la espera de vernos germinar llenando de primavera el mundo que habitamos.

Acariciamos el alma en su Palabra... el salmo 123, servido hoy en la liturgia, da certezas a nuestra búsqueda, dando a Dios la iniciativa y a nosotros la garantía de que acercándonos a la fuente, mananos en su misma agua y bebiendo de ella, damos de beber a muchos...


"Si el Señor no hubiera estado de nuestra parte
–que lo diga Israel–,
si el Señor no hubiera estado de nuestra parte,
cuando nos asaltaban los hombres,
nos habrían tragado vivos:
tanto ardía su ira contra nosotros. 

Nos habrían arrollado las aguas,
llegándonos el torrente hasta el cuello;
nos habrían llegado hasta el cuello las aguas espumantes.
Bendito el Señor, que no nos entregó en presa a sus dientes. 

Hemos salvado la vida,
como un pájaro de la trampa del cazador;
la trampa se rompió, y escapamos.
Nuestro auxilio es el nombre del Señor,
que hizo el cielo y la tierra" (salmo 123)...


Recordemos y pensemos en los enfermos del blog... en todos, uno a uno... también en sus familias... -incorporamos hoy a dos enfermos graves, relativamente muy jóvenes y con pronósticos muy complicados, Jesús y Manolo, ambos enfermos de cáncer muy avanzado, que nos necesitan para abrirse plenamente a la confianza y en medio de esta lucha dolorosa, difícil de sufrir, e interpretar- ...Son muchos los que están atravesando senderos tortuosos y oscuros, que necesitan de la fe de todos, para que en el corazón de cada uno anide la fe que les permita sentir consuelo... fortaleza... esperanza... Sabemos que "hay que traspasar el dolor con la luz de la esperanza"... Nos acogemos entonces, a la intercesión del Beato Tito, con quien hacemos cada día, camino a la confianza, y miramos al cielo esperando ser socorridos... escuchados... atendidos... Dios sabe que queremos la salud de nuestros enfermos y un aumento de fe y confianza en el corazón de cada uno...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …

3 comentarios:

  1. “NUESTRO AUXILIO ES EL NOMBRE DEL SEÑOR”
    Salmo 123

    Nos avisa con insistencia los Evangelios, en boca del propio Jesús, del peligro de abandonar esta vida sin encontrarnos en Gracia. El Señor es nuestro auxilio, invocar su nombre nos aferra a su misericordia. A Él tenemos que demostrarle gratitud y obediencia, amparados en el Espíritu Santo que nos guía por el amor a Dios y a los hombres.

    Busquemos en la Palabra y encontraremos las respuestas a nuestra desesperanza. Del Señor lo hemos recibido todo y sólo nos pide amor. Dios supera la justicia humana y con ella habita la paz. Huyamos del pecado, démosle la espalda o enfrentémonos a él, actuemos con fervor y dignidad cristiana, agarrémonos con fuerza a la cruz de nuestra redención, evangelicemos con la Caridad y vivamos felizmente en el rebaño del Señor.

    Hoy tenemos que suplicar y rezar en comunión de los Santos por Jesús, que se encuentra gravemente enfermo por esta enfermedad que nos acosa, también está en una situación parecida Rafaela. Por ambos, con La Virgen María, Auxiliadora de los enfermos, pedimos la intercesión del Beato Tito Brandsma, para que sean auxiliados en el nombre del Señor. No nos olvidamos del resto de enfermos y de sus familias, para que todos encuentren propicia la voluntad de Dios. Amén



    ResponderEliminar
  2. “LIBERADOS DEL PECADO OS HABÉIS HECHO ESCLAVOS DE LA JUSTICIA”

    Pablo, en su carta a los Romanos en la lectura de hoy nos hace una clara diferenciación entre el “hombre viejo” y el “hombre nuevo”, entre aquél, muerto porque aún no ha conocido a Cristo y éste, renacido porque ya ha comprendido el mensaje salvífico que Jesús nos trae.

    Hoy Pablo hace una clara distinción entre estos dos tipos de hombres. El “hombre viejo” está vinculado con el pecado, la muerte, la injusticia y la antigua ley. Sin embargo el hombre nuevo está relacionado con la obediencia, la vida, la justicia y la gracia.

    Pablo nos insta a que abandonemos el pecado en nuestra vida, que nos desprendamos de nuestro raído traje de “hombre viejo” y nos vistamos de gala para el Señor, que este traje de gala sea nuestra nueva vestimenta de “hombre nuevo”. Un “hombre nuevo” que vive de acorde a las enseñanzas de Cristo, un “hombre nuevo” que renace y se llena de vida, un “hombre nuevo” que guía sus pasos en una obediencia a Dios y sus mandatos, un “hombre nuevo” lleno de gracia por la obra de Dios y gracias a su fe.

    Pablo, hoy en su carta nos apela a que nos liberemos del pecado y nos entreguemos a la justicia divina. Pablo hoy en su carta nos apela a que sigamos los mandatos de Jesús y que vivamos no según Su “ley”, sino según Su Gracia.

    Pero si hemos resucitado con Cristo en una vida nueva, hemos de vivir nuestro día a día según esa vida. Por ello no debemos distraernos ni un sólo momento, no podemos bajar la guardia porque en el momento que lo hagamos puede colarse en casa ese “ladrón” del que nos habla hoy Lucas en el evangelio. Jesús nos insta a estar siempre con una actitud expectante ante la venida del “Hijo del Hombre” y que esta actitud se encuentre dentro de los parámetros de sus enseñanzas, que en esta actitud fomentemos los valores que Él nos transmite, que esta actitud sea un modelo de vida cristiana.

    No actuemos como ese empleado que relaja sus costumbres ante la tardanza de su amo y se deja llevar por vicios y corruptelas, no relajemos nuestro comportamiento ante la tardanza de la segunda venida de Jesucristo, ante la Parusía, al igual que estaban empezando a relajarse las primeras comunidades cristianas. Porque no os quepa duda que Él volverá, el “Hijo del Hombre” tiene pendiente una segunda venida en la que nos demostrará toda su gloria.

    “Entonces verán el Hijo del Hombre que vendrá en una nube con poder y gran gloria” Lucas 21:27

    A nuestros enfermos del blog y a sus familias quiero enviarles hoy el mensaje de esperanza de “vuelta a la vida” del hombre nuevo resucitado por la gracia de Dios, quiero enviarles el mensaje de confianza sobre la llegada de la Parusía, quiero enviarles el mensaje de fe en las palabras transmitidas por Jesús.

    Hoy quisiera incluir en mis rezos y plegarias a Jesús, gravemente enfermo, y quisiera apoyar a su familia en estos duros momentos. Solicito la intercesión de nuestro beato Tito para que junto con la comunión de los santos consigamos aplacar el sufrimiento de todos nuestros enfermos y reconfortarlos en los momentos de padecimiento.





    ResponderEliminar
  3. Amen seguimos rezando por todos los enfermos especialmente por los que mas lo necesitan que Dios no nos abandone

    ResponderEliminar