miércoles, 21 de abril de 2021

"Aclamad al Señor, tierra entera"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


El cielo es la gran promesa hecha por Jesús, para nosotros, en su Palabra, enlazada además con la Voluntad del Padre, que quiere la salvación para todos... Jesús dejó el cielo y vino a nosotros, para que esta promesa se realice en cada uno, perpetuando su presencia real en la eucaristía, verdadero alimento para atravesar el tiempo, fortalecidos en el espíritu, con más mirada y horizonte, que lo puramente material...

La liturgia durante la pascua, nos acerca al nacimiento de la Iglesia, dada a luz entre persecución y desconcierto, queriéndose imponer, sin que fuera posible, la fuerza de la incredulidad a la fe de los testigos... Confusamente la fortaleza de los débiles es el gran desconcierto de los que no saben combatir más que con la fuerza, segando la paz con el martirio, ajenos a que esta semilla fecunda misteriosamente el terreno de la fe en el alma de muchos otros, como germen de un continuo florecer del Reino en cada tiempo... 

La alabanza es el eco permanente de la liturgia, que devuelve a Dios con su misma Palabra el sentir de cada corazón creyente, agradecido y suplicante, para que Dios lo sea todo en todos, siempre...

"Aclamad al Señor, tierra entera;
tocad en honor de su nombre,
cantad himnos a su gloria.
Decid a Dios: «¡Qué temibles son tus obras!».

«Que se postre ante ti la tierra entera,
que toquen en tu honor,
que toquen para tu nombre».
Venid a ver las obras de Dios,
sus temibles proezas en favor de los hombres. 

Transformó el mar en tierra firme,
a pie atravesaron el río.
Alegrémonos en él,
que con su poder gobierna enteramente" (Salmo 65)...

Mirando al cielo suplicantes, presentamos todo el dolor del mundo a Dios, para que lo ilumine y lo resuelva... nos acordamos de los enfermos del blog... de todos, uno a uno... también sus familias... pedimos la intercesión del Beato Tito, él nos puede ayudar, y creemos además en el poder de Dios... ¡¡estamos en sus manos!!... que sepamos dar sentido al momento presente y nos cobijemos en la confianza, seguros de que Dios nos sostiene y viene con nosotros... nuestro dolor es su dolor, y todo puede ser para bien, si amamos a Dios y nos dejamos amar en su amor...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria