martes, 17 de octubre de 2017

"... creo en la santa Iglesia católica..."


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


"Creo en la Santa Iglesia Católica"
En el credo afirmamos CREER en la Iglesia... pero en verdad, nos cuesta ser coherentes con esta afirmación y no nos entregamos a esta verdad sin condiciones... 

La Iglesia, es la unión de Cristo con la humanidad, en un mismo y único fin: que los miembros de este cuerpo (nosotros), unidos a la CABEZA (Cristo), formemos una unidad de pensamiento... sentimientos... acciones... que den forma objetiva a la Obra de Cristo, iniciada en la Encarnación,  llevada a cabo en la Redención y que se consumará al final de los tiempos...


Somos todos más críticos que coherentes, a la hora de asumir, que el rostro de la Iglesia lo desdibujamos nosotros con nuestras ambiciones (queremos ser como Dios)... nuestras incoherencias... nuestras omisiones... no valoramos, por el contrario, que es la Cabeza (Cristo, Dios mismo) quien asume sin reproches, la espera larga de nuestra adhesión a la gracia, para que emerjan los frutos de vida que se contiene en este misterio fecundo, en el que tenemos parte activa...

No hay fe en Cristo, sin incluir la fe en la Iglesia... y no se cree en la Iglesia si no nos incorporamos a Ella en la totalidad que comporta... asumir su doctrina... aceptar su enseñanza... cumplir sus mandatos... recibimos de Ella más que damos, pero hemos de dar lo que nos pide...


La comunión es fruto de la Iglesia y nosotros la vivimos... ocupándonos de los hermanos... arropándonos en ellos... no dejemos de recorrer este camino, que tiene tesoros preciosos para nosotros todos... recemos como cada día unos por otros... hagamos memoria y recordemos a todos los enfermos del blog... uno a uno...también a sus familias... busquemos el amparo del Beato Tito y mirando al cielo pongamos en sus manos nuestras súplicas con corazón confiado... nuestra Madre nos alcanzará de su Hijo nuestros deseos y no dejará de acunarnos mientras caminamos en la noche, a la espera de los frutos de nuestra fe... humilde.... constante... perseverante... coherente con nuestro credo en todo su contenido... seamos valientes... atrevámonos a creer sin condiciones...
"confiando en el Señor no me he desviado"


Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …