jueves, 25 de enero de 2018

"Comenzó Jesús a manifestar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalen y padecer allí mucho"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


"Comenzó Jesús a manifestar a sus discípulos que tenía que ir a Jerusalen
 y padecer allí mucho por parte de los ancianos, sumos sacerdotes y escribas, 
y que tenía que ser ejecutado y resucitar al tercer día.
Pedro se lo llevó aparte y se puso a increparlo: 
"¡Lejos de ti tal cosa Señor! eso no puede pasarte". 
Jesús se volvió y le dijo a Pedro: "¡Ponte detrás de mi, Satanás! 
eres para mi piedra de tropiezo,
 porque tú piensas como los hombres, no como Dios" (Mt. 16,21-23).

Nos saca Jesús hoy un tema a los primeros planos, al que nosotros nunca queremos hacer frente... Nos despierta de nuestro letargo, dándonos una palmada de realismo que nos desmonta nuestras "musarañas"... la vida humana está atravesada por el dolor, provocado por el mal y el pecado... Y el Reino es el proyecto que hace posible la espera entre el germen y el fruto... Pero esta siembra que guarda tan hermosa esperanza, queda abrazada por el misterio, a la sola luz de la fe; de ahí, que solo caminando detrás de Jesús, podemos dar pasos ciertos de estar encaminados al destino que Él nos conduce... 

El planteamiento, por tanto es incomprensible, y los discípulos -como cualquiera de nosotros- se resisten a asumir tales riesgos, queriéndoselos evitar, con la mejor voluntad al mismo Jesús... es difícil aceptar que "los caminos de Dios son más altos que los nuestros, y sus planes que nuestros planes"... por eso la confianza es al actitud correcta del hijo de Dios que acepta su condición de criatura...


El dolor no tiene la ultima palabra, sí la esperanza y la fe... Dejémonos llevar por la corriente de la gracia que nos capacita para hacer este proceso de libertad, aceptando las veredas de la vida como nos salen al paso, sin pedir explicaciones... sí buscando sentido para argumentar nuestra entrega hasta el final, sabiendo que no vamos a quedar defraudados...

También a Jesús le costó pasar por la muerte... pero gracias a su muerte, tendremos nosotros la vida... Por la comunión de los santos, todas nuestras muertes darán vida a muchos, como la de otros muchos nos la dará a nosotros.... En esta fe, queremos hacer florecer nuestra esperanza...


Nosotros, los que estamos haciendo frente al dolor y al sufrimiento con las armas que Jesús nos da, renovamos hoy nuestro deseo de mantenernos en el camino cierto de la confianza... Nos acunamos unos en la oración de los otros y rezamos como cada día para ayudarnos... Recordamos a los enfermos del blog... a todos, uno a uno... también a sus familias y acogidos a la intercesión del Beato Tito, miramos al cielo, seguros de que nuestro camino está amparado por la voluntad de Dios que nos bendice en cada dolor ayudándonos a crecer en gracia... Volvemos a anclarnos en la confianza, porque nuestra peregrinación avanza y la confianza nos configura... 
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …