miércoles, 12 de enero de 2022

"Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Cuando percibimos en nosotros la eficacia de la fe, el impulso que causa en nosotros esta experiencia es irresistible; y tiene que ser así, porque la fe no es algo material aunque repercuta en lo material, pero de paso; el camino de la fe, que da talante a la vida es un proceso que se centra en la causa y no en los efectos... 

Mientras los discípulos y las turbas van detrás de los milagros, Jesús pasa la noche en oración, unido al Padre, porque él ha venido al mundo a hacer la voluntad de quien le ha enviado, y la tiene que vivir sin separarse de Él... Atrevámonos a centrar la vida en la fe y arriesguemos; vayamos con Jesús por Él mismo, que es más que su dones, y sus dones llegarán a nosotros por añadidura...

Jesús predica para nosotros... su Palabra nos revela los secretos del Reino, y en sus valores hemos de poner la meta de nuestra vida... agradezcamos a Dios la iniciativa de venir a nosotros y quedarse con nosotros para siempre...

"Yo esperaba con ansia al Señor;
él se inclinó y escuchó mi grito.
Dichoso el hombre que ha puesto
su confianza en el Señor,
y no acude a los idólatras,
que se extravían con engaños. 

Tú no quieres sacrificios ni ofrendas,
y, en cambio, me abriste el oído;
no pides sacrificio expiatorio,
entonces yo digo: «Aquí estoy» 

«Como está escrito en mi libro:
para hacer tu voluntad»
Dios mío, lo quiero,
y llevo tu ley en las entrañas. 

He proclamado tu salvación
ante la gran asamblea;
no he cerrado los labios:
Señor, tú lo sabes" (Salmo 39)... 


Recemos por nuestros enfermos, deseando estos dones para todos ¡¡peregrinos de la confianza!! que vamos haciendo ruta en el deseo de alimentarnos en la comunión, madurando la fe y la esperanza, disponiéndonos a la Voluntad de Dios, que es el amor de caridad, donde todos queremos encontrarnos... Que la intercesión del Beato Tito nos alcance la salud para todos, y que este camino arduo que recorremos, nos permita dar frutos de vida en el mundo que vivimos...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria..