sábado, 22 de septiembre de 2018

"En la comunión es donde un carisma se vuelve auténtica y misteriosamente fecundo"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


La pluralidad del Espíritu Santo a la hora de edificar la Iglesia es admirable; él no deja de enriquecer a la iglesia con sus carismas que pone al alcance de todos impulsando al bien mayor que es Cristo... Los carismas son todos para la construcción de la gran familia de los hijos de Dios, que hagan posible expresar el Reino en el mundo, de ahí, que "en la medida en que un carisma dirija mejor su mirada al corazón del Evangelio, más eclesial será su ejercicio. En la comunión, aunque duela, es donde un carisma se vuelve auténtica y misteriosamente fecundo. Si vive este desafío, la Iglesia puede ser un modelo para la paz en el mundo" (EG. n.130)...

La encomienda que nos sugiere el Papa requiere la colaboración comprometida de todos nosotros, y el camino se irá ampliando con las luces y las sombras que todos vayamos superando al vivir y al convivir, porque la fe no es una experiencia estática, sino todo lo contrario, el dinamismo que la fe aporta al vivir cotidiano es la gran riqueza que oculta el don de Dios y que se nos pone de manifiesto de la forma mas simple y sencilla haciendo posible la gracia de la comunión para crecimiento de todos... El Espíritu Santo es quien suscita la unidad de la diversidad, la pluralidad, la multiplicidad; si nos acercamos a Él, le permitimos expresarse en nosotros...


Conscientes pues de que vamos juntos y unidos en la búsqueda del mismo bien, recemos como todos los días, unos por otros, recordando con precisión a los enfermos del blog... todos, uno a uno... también sus familias... con el corazón en la confianza, miremos al cielo suplicantes, y acogiéndonos a la intercesión del Beato Tito pidamos la salud y la fortaleza de la fe mientras vamos de camino, sin titubeos... seguros... firmes... confiados... Dios puede hacer lo que pedimos y permitir reflejar su gloria en nosotros como fruto de su misericordia...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro - Ave María - Gloria...