domingo, 9 de mayo de 2021

"El Señor revela a las naciones su salvación"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Seguimos recibiendo de Jesús las consignas de identidad con que mostrar al mundo que somos de los suyos, viviendo comprometidos en el proyecto de su Reino, haciendo del amor ley, dilatando en el tiempo los valores con que Jesús pasó haciendo el bien, ordenando la vida en los perfiles de su misma causa... esto implica caminar contra-corriente, discernir eligiendo lo que construye, favorecer; así se facilita el bien a todos, y el bien de todos...

Es el mismo amor de Jesús al Padre, la oferta que nos hace Jesús a los que nos llama amigos, porque hacemos lo que él nos dice... Es en su amor donde hemos de amar, dejándonos amar primero... Un amor gratuito, desinteresado, sin parcialidades ni intereses; algo que es imposible para nosotros, pero que recibimos por gracia, cuando pertenecemos a él, como fruto de haber permanecido en él, como él nos siguiere...

El amor de Dios, lo derrama en nosotros el Espíritu Santo... el Espíritu Santo es el fruto de la Pascua de Jesús; lo recibimos en la liturgia por la fe y la gracia... Estamos cerca de pentecostés... supliquemos y deseemos ser revestidos de la fuerza de lo alto, para ser testigos de amor verdadero... Recemos con la Iglesia el salmo 97, dando gloria a Dios, fiel y omnipotente...

"Cantad al Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas;
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. 

El Señor da a conocer su victoria,
revela a las naciones su justicia:
se acordó de su misericordia y su fidelidad
en favor de la casa de Israel. 

Los confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
Aclama al Señor, tierra entera,
gritad, vitoread, tocad" (Salmo 97)...


Busquemos socorro y amparo en la misericordia de Dios... pidamos por los enfermos del blog... uno a uno... también sus familias... Recojamos nuestro sentir angustiado en la intercesión del Beato Tito y renovemos la confianza ¡¡plena confianza!! somos los peregrinos de esta perla, que conduce, serena, calma... nos fiamos de Dios y a Él confiamos nuestro presente amplio, que cobija el mundo entero... Que venga su espíritu a nosotros y nos dé la valentía de convertirnos a la fe secundando la gracia en nosotros...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria