jueves, 21 de octubre de 2021

"Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Escuchar a Jesús hoy en el evangelio, si no ponemos un contexto a la escucha, nos puede dejar, al menos, pensativos, «He venido a prender fuego en el mundo, ¡y ojalá estuviera ya ardiendo!" "¿Pensáis que he venido a traer al mundo paz? No, sino división"... y es que la fe es signo de discordia cuando quitamos del horizonte la trascendencia y nos queremos adueñar el mundo, la vida y el porvenir...  

A Jesús mismo le costará la vida salvarnos, y quien decida vincularse a Jesús, y con él, acercar el reino al presente, le será inevitable la confrontación con las corrientes contrarias que intentan dominar todo, desde las sombras que proyectan lo puramente material y competitivo...

El salmo 1, servido hoy en la liturgia, y que tanto eco tiene entre nosotros "peregrinos de la confianza", es el marco donde enraizar nuestra fe y el camino a recorrer cada día, apoyados en la Palabra de Dios y el poder absoluto de su misericordia, donde sostenernos en el entretiempo cultivando valores eternos sin miedo a los enemigos de la fe, que nos atacan sin piedad, aparentando ser más fuertes que nosotros...

"Dichoso el hombre que no sigue el consejo de los impíos,
ni entra por la senda de los pecadores,
ni se sienta en la reunión de los cínicos;
sino que su gozo es la ley del Señor,
y medita su ley día y noche. 

Será como un árbol plantado al borde de la acequia:
da fruto en su sazón y no se marchitan sus hojas;
y cuanto emprende tiene buen fin. 

No así los impíos, no así;
serán paja que arrebata el viento.
Porque el Señor protege el camino de los justos,
pero el camino de los impíos acaba mal" (Salmo 1)... 


Con el entrañable recuerdo, como cada día, para cada enfermo del blog, poniéndoles a todos ante la misericordia de Dios para que actúe en ellos, miramos al cielo pensando en cada uno... también en sus familias... queremos apoyar cada situación, que es una gran batalla en la que nos necesitan todos para luchar... Que la intercesión del Beato Tito, nos haga posible ver realizar lo que cada uno suplica con fe humilde, insistente, perseverante... Ojalá veamos la gloria de Dios en nosotros, y lo sepamos agradecer coherentemente...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria...