domingo, 26 de agosto de 2018

"La evangelización tiene mucho de paciencia y evita maltratar límites"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


"La comunidad evangelizadora se mete con obras y gestos 
en la vida cotidiana de los demás, 
tocando la carne sufriente de Cristo en el pueblo.
Acompaña a la humanidad en todos sus procesos, 
por más duros y prolongados que sean. 
Sabe de esperas largas y de aguante apostólico".
(EG. n.24)

El planteamiento misionero del Papa en esta exhortación está diseñado con una precisión, que si nos paramos despacio en su enseñanza, salimos instruidos y motivados a tomar parte activa en tan ilusionante reto, que además es llamada... Curiosamente el encuentro con uno mismo, a la luz de la gracia que nos desvela el amor de Dios, siempre tienen una onda expansiva que nos dispone a salir de nosotros mismos, dispuestos a servir a los demás haciendo el bien a todos...

Para empezar, dejémonos evangelizar, para que habiendo saboreado la paciencia de Dios y su misericordia, podamos abrir caminos a otros muchos que también están necesitados de ella... "La comunidad evangelizadora siempre está atenta a los frutos, porque el Señor la quiere fecunda" (EG. n.24)... Si nos tomamos en serio el Evangelio, sentiremos que divulgarlo es muy comprometido, porque entregarse a esta causa exige todo de nosotros, pero a la vez, no podremos dejar de hacerlo; su misma fuerza nos impulsa, ya que quien de verdad lo hace es Dios y su gracia... 


Hemos de seguir mirando al cielo implorando ayuda y decisión para involucrarnos en la parte activa de la Iglesia, decididos a ser apóstoles... Para ello debemos perseverar en la oración y buscar el contacto personal y directo con Jesús, para que la experiencia de su amistad nos deje el alma prendida en su mismo deseo... Pensemos igualmente unos en otros, y recordemos a los enfermos del blog, uno a uno... también sus familias... La fe puede propiciarnos los frutos que pedimos cada día, en la esperanza de que nos sean concedidos y podamos dar gloria a Dios en nuestras mismas personas... Dios cuenta con nosotros para hacerse presente en los hombres y mujeres de nuestro tiempo... Incorporémonos a sus amigos y crezcamos nuestra fe en Él...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro - Ave María - Gloria...