domingo, 23 de mayo de 2021

"Envía tu Espíritu, Señor, y repuebla la faz de la tierra"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


El misterio de la gracia es insondable, nuestra capacidad es insuficiente para percibirlo, necesitamos el Espíritu Santo, la gran promesa de Jesús y fruto maduro de su Pascua... Acojamos el don de Dios derramado en el corazón creyente, capaz de transformarnos a su luz, en su amor, por caminos nuevos, nuevos valores, nuevo orden de preferencias...

La pedagogía de la fe, entrega al espíritu el milagro de vincularnos a la obra de la gracia, y nos vamos transformando en apóstoles, saliéndonos de los moldes culturales, "paganos", a que nos quieren someter los poderes de este mundo, ensombrecidos por las fuerzas del mal...

La liturgia, hoy, entrega al cristiano la misma misión de Jesús, y su mismo poder para destruir el mal, porque el cristiano debe vivir en Cristo, amar en su corazón, hablar su Palabra, mover sus manos en nuestras acciones, mostrando el Reino a este mundo... Deseemos el espíritu, supliquemos su venida, acojamos su fuerza trasformadora, recibamos en su luz la verdad, y dejemos que la verdad nos conduzca al amor, la paz, la caridad... Alabe nuestra alma al Señor y bendigamos al Señor, que acerca su bondad a nosotros...

"Bendice, alma mía, al Señor:
¡Dios mío, qué grande eres!
Cuántas son tus obras, Señor;
la tierra está llena de tus criaturas. 

Les retiras el aliento, y expiran
y vuelven a ser polvo;
envías tu espíritu, y los creas,
y repueblas la faz de la tierra. 

Gloria a Dios para siempre,
goce el Señor con sus obras;
que le sea agradable mi poema,
y yo me alegraré con el Señor" (Salmo 103)... 


Mirando al cielo suplicantes, presentamos todo el dolor del mundo a Dios, para que lo ilumine y lo resuelva... nos acordamos de los enfermos del blog... de todos, uno a uno... también sus familias... pedimos la intercesión del Beato Tito, él nos puede ayudar, y creemos además en el poder de Dios... ¡¡estamos en sus manos!!... que sepamos dar sentido al momento presente y nos cobijemos en la confianza, seguros de que Dios nos sostiene y viene con nosotros... nuestro dolor es su dolor, y todo puede ser para bien, si amamos a Dios y nos dejamos amar en su amor...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria