miércoles, 28 de octubre de 2020

"A toda la tierra alcanza su pregón"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


No actúa Jesús de improviso en sus decisiones, y ¡¡Jesús es Dios!!... ¡¡qué será en verdad la Voluntad del Padre!! ¡¡qué esconderá sus designios, cuando Jesús lo persigue como único objetivo en el horizonte de su vida!!... largas horas de oración ¡¡noches enteras!! buscando el querer del Padre, y cómo llevarlo a cabo...

El Padre incorpora a la misión de Jesús un grupo de seguidores, que llevarán con él, al mundo entero, la noticia esperanzadora de que al mundo hemos de hacer llegar, entre todos, el Reino de Dios, un Reino atípico ¡¡es verdad!!, no inmediato ¡¡por la soberbia del ser humano!!, pero gracias a Jesús, y a los que van con él, se abrirá camino entre las tinieblas del mundo y nos llevará a todos a la luz, venciendo el pecado y la muerte, que son el fruto, que lejos de Dios, el mundo y los hombres, generan en el tiempo...

Escuchemos a Jesús pronunciar nuestro nombre, y aceptemos su invitación a ir con Él... "soñemos" con Jesús su Reino, y permitamos ¡¡hagamos posible!! que pase por nosotros esa gracia que acerque por fin, la paz, la justicia, el perdón, la convivencia, el amor... El eco de su Palabra resuena en el mundo, y expresada está su gloria en todo lo creado... ¡¡alabemos a Dios por sus obras!!, lo hace la liturgia, y nos invita a incorporamos a esta alabanza, proclamando y celebrando su gloria...

"El cielo proclama la gloria de Dios,
el firmamento pregona la obra de sus manos:
el día al día le pasa el mensaje,
la noche a la noche se lo susurra.

Sin que hablen, sin que pronuncien,
sin que resuene su voz,
a toda la tierra alcanza su pregón
y hasta los límites del orbe su lenguaje" (Salmo 18)...


Que nuestras súplicas unidas lleven al cielo nuestras necesidades... Pensemos, como cada día, en los enfermos del blog... todos, uno a uno... también sus familias... Volvamos, cómo no, a sumar los que siguen sumándose a la pandemia como infectados, y también, los que están en vanguardia aliviando con su entrega y servicio, el dolor de los otros... sin olvidarnos también de los que se fueron sin avisar, y de tantas familias como han quedado sumidas en el dolor... Que la intercesión del Beato Tito nos atraiga nuevas gracias, y frutos a nuestra fe, de salud para todos... -sigamos insistiendo en nuestros ruegos por José María que está grave y necesita ayuda, él y los suyos-...
"confiando el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria