viernes, 26 de mayo de 2017

Gozo que enjuga las lágrimas...



Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Hasta que Dios sea un consuelo para nosotros, dejando perder nuestras penas en Él... sacando luz de su Misterio y proyectando nuestra esperanza en su Voluntad, tenemos que aventar el susurro de nuestro corazón con ese murmullo "Ven Espíritu Santo", sin dejar de invocarle, desde todos los atributos que conocemos de Él, y que ya algunos sabemos a qué saben, por experiencia...

Descansar en Dios por la fe... recibir el consuelo y la fortaleza en el alma para sufrir con paz y esperanza... es una gracia que tienen los muy amigos de Jesús... los que van poniendo en primeros planos las cosas que son para siempre y para todos... por qué no ¡¡nosotros!! que aunque nos sentimos débiles y vulnerables, intuimos ese "aliento" al que nos vamos acercando -quizás sin entregarnos del todo- pero sí que sinceramente... sin duda es la gracia, que tiernamente va floreciendo con nuestra perseverancia... 

Dar a Dios paso en nuestra vida no es recortar nada de lo que puede hacernos felices... el "TODO" incluye la "parte", y la opción por algo, conlleva centrarte en lo que valoras como un reto, despreocupado de lo que puede serle rival, mientras estás en la conquista...  es la actitud que hemos de ir manteniendo con el deseo de Dios, la súplica al Espíritu Santo y la oración asidua... acercando nuestros deseos a la Voluntad de Dios, que es donde reside nuestro bien, nuestro crecimiento, y nuestra plenitud...

Vamos ampliando nuestra oración con los versos que le vamos sumando... donde tenemos que enfatizar es en el "Ven, Espíritu..." lo demás, será lo que el mismo Espíritu al llegar, nos vaya dejando sentir, y con lo que vayamos de verdad quedando prendados en Él y Él en nosotros... procuremos rezar todos juntos, con el corazón bien dispuestos, a que Dios no deje de trabajarnos y su gracia nos vaya transformando y permitiendo vivir como verdaderos hijos de Dios... añadimos hoy,

"gozo que enjuga las lágrimas
y reconforta en los duelos".


Rezar une... los dones de Dios tienen que ir creciendo en nosotros hasta que podamos expresarnos desde ellos... no temamos incorporar a nuestra vida la gracia ¡¡es determinante!!, es la tierra buena donde la semilla de la fe puede dar frutos y flores, que cobijen, adornen y den de comer a otros muchos... 

Recemos hasta memorizar, que muchas veces es de gran ayuda tener de dónde tirar en momentos de apuro... y si sale de dentro, tiene más fuerza, porque podemos sumarle experiencias anteriores, que nos hayan servido...
"Ven, Espíritu divino, manda tu luz desde el cielo.
Padre amoroso del pobre;don en tus dones espléndido.
Luz que penetra las almas; fuente del mayor consuelo.
e
Ven, dulce huésped del alma, descanso de nuestro esfuerzo,
tregua en el duro trabajo, brisa en las horas de fuego",
"gozo que enjuga las lágrimas
y reconforta en los duelos".



Las palabras de Jesús nos desconciertan, pero no por ello dejan de ser veraces... además van abriendo brecha al alma y nos van permitiendo sintonizar con las verdades últimas a las que ya no damos de lado, porque intuimos su grandeza, aunque aún no las podamos asimilar...

Peregrino de la confianza, que en racimo vamos por la vida, buscando luz para iluminar nuestro dolor... demos gracias a Dios, porque hemos encontrado la fuente, de donde manan para nosotros ríos de agua viva... nuestro dolor está henchido de esperanza, porgue su Palabra contiene promesas preciosas para nosotros... nuestra noche tendrá mañana, porque Dios es Luz y viene a nuestro lado...

Acudamos a la oración como cada día... recojamos a nuestros enfermos, pasemos lista... que estén todos... uno a uno... pidamos su intercesión al Beato Tito, para que ante la Madre del Carmelo y su Hijo, nos traiga del cielo lo que esperamos con fe y confianza... la salud para todos... fortaleza para luchar, ánimo para esperar y firmeza para recorrer el camino de la Voluntad de Dios entero, sin salirnos de sus sendas, por oscuros que sean los tramos que crucemos.,..  

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …