viernes, 4 de diciembre de 2020

"El Señor es mi luz y mi salvación"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


La liturgia sigue despertando la esperanza en el corazón creyente, allí donde el humilde sabe que dependemos de Dios por más que alardeemos de saberes "humanos" y hasta "inhumanos", y lo hace, de labios del profeta, dándonos a conocer otras perspectivas, que a simple vista parecen utópicas, pero que no lo son... Por nuestra soberbia, nosotros, los de la era de la civilización y el progreso, no creemos que el mundo se arregle desde otras categorías que el poder, el éxito, los laboratorios, la manipulación de valores... y desde ahí, vemos por la realidad, cómo vamos de mal en peor... Gracias a Dios, el Señor lo sabe y viene a nosotros en la ternura de un niño para que no temamos y demos cabida a su presencia, que es amor...

La fe es el motor de la gracia, y por la fe, podemos ver florecer la vida cuando necesitamos el socorro del cielo... pero no una fe mágica, interesada, para conseguir cosas, que no sabemos si en verdad es lo que Dios quiere darnos... la fe es una adhesión a Dios y a su Voluntad, escuchando a Dios mismo en su Palabra, decirnos cómo es Él, y cómo quiere que seamos nosotros, dentro de su proyecto de amor a todos y para todos...

La liturgia nos invita a rezar en el testimonio del salmista que ya habitaba la fe, pero se sentía necesitado de renovarla en la alabanza suplicante que es como la fe se alimenta y se crece...

"El Señor es mi luz y mi salvación,
¿a quién temeré?
El Señor es la defensa de mi vida,
¿quién me hará temblar? 

Una cosa pido al Señor,
eso buscaré:
habitar en la casa del Señor
por los días de mi vida;
gozar de la dulzura del Señor,
contemplando su templo. 

 Espero gozar de la dicha del Señor
en el país de la vida.
Espera en el Señor, sé valiente,
ten ánimo, espera en el Señor" (Salmo 26)...


Recordando a nuestros enfermos, peregrinos de la confianza, con los que vamos haciendo camino cada día, en nuestro blog... pedimos al cielo para ellos, la salud, la fortaleza, la esperanza, la fe... nos apoyamos en la intercesión del Beato Tito, poniendo ante él nuestra confianza, presentándole nuestras súplicas para que las lleve a Dios, y Dios las cumpla... -incorporamos hoy a Clotilde, en espera de resultados de biopsia, para que se sienta apoyada en estos momentos de incertidumbre y la confianza de corazón sea la actitud que le ayude a que su fe florezca frutos de vida para ella, y para los que a ella se acerquen en este momento difícil-...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria