jueves, 12 de octubre de 2017

"...descendió a los infiernos..."


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Partiendo de la Encarnación del Verbo, cada paso que se desvela del misterio de Cristo, es un nuevo abismo para nuestra razón... si prescindimos de la fe para acercarnos a ello, vemos que es ilógico, que parece irreal y sin sentido... Pero la fe cristiana tiene unos contenidos doctrinales, que debemos conocer... pensar y profundizar en ello... y al final, permitir que la luz pascual penetre en nuestro interior y provoque el acto de fe, rindiéndonos a lo que nos supera, pero que a su vez, está a nuestro alcance, porque es obra de la gracia y no fruto de la inteligencia...

El descenso de Jesús a los infiernos, es afirmar la muerte de Cristo y su triunfo sobre la misma muerte y el mal, a favor nuestro... desde ese mismo abismo, le abre las puertas del cielo a los justos que le habían precedido... la fuerza de la Cruz y su Victoria, recapitula el pasado, presente y futuro, en la Persona de Cristo, Dios y hombre verdadero... ante esta verdad, digamos convencidos, CREO...


Estamos salvados en este acto supremo de amor gratuito y generoso, por parte de Dios hacia el ser humano y hemos de adherirnos a su fuerza y poder trasformador, para que el mundo cambie... Agradezcamos a Dios su compromiso y su apuesta por nosotros, permitiendo, en nuestra vida, la eficacia de estos misterios... 

Hoy tenemos una noticia dolorosa, pero a la luz de estos misterios esperanzada... José Diego ha traspasado el tiempo y ha podido experimentar que lo que profesamos en la fe es verdad... él ha sabido hacer el paso en la confianza, y ha sido la Virgen la que ha venido a acompañarle en este trance último... ha sido un ejemplo en la enfermedad y ha mantenido todo el tiempo la fortaleza, la esperanza, la confianza y la adhesión plena a la Voluntad de Dios... esa es su corona... pedimos por él y por su familia, para que en estos momentos puedan experimentar la paz, y el consuelo que Dios aporta, cuando le miramos a Él  y creemos...


Acudamos a nuestra cita diaria y  recemos unos por otros... recordemos a los enfermos del blog... a todos, uno a uno... imploremos la intercesión del Beato Tito y miremos al cielo... pongamos en común nuestras súplicas y ayudémonos todos a afianzar la fe, esperando de Dios, ver cumplidos nuestros deseos... entremos en la paz que da la confianza de corazón y no pasemos por alto lo que Él quiere... cuando la gracia es incorporada a nuestra vida, todo es más fácil, más llevadero, y obtienen mejor respuesta... de Él para nosotros y de nosotros para Él... demos contenido a nuestro acto de fe, afirmando las verdades que creemos...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …