lunes, 15 de abril de 2019

"El Señor es mi luz y mi salvación"...



 Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Cuando el horizonte que tenemos delante es la Cruz, sólo la esperanza alimenta la fe... una esperanza activa, no sostenida por cualquier argumento ficticio, no; sólo las promesas guardadas en la Palabra de Dios, tienen capacidad para trasmitir al alma certezas, que iluminan la paciencia en la confianza...

Vivir es una tarea ardua; no es la vida una aventura al azar para soñar despiertos, persiguiendo ilusiones vanas ¡¡todo lo contrario!!, la vida es más real que nuestros sueños y ella misma nos despierta y nos sorprende, haciéndonos encontrar -tantas veces- desprovistos de recursos para hacerle frente... ¡¡Cuántas actitudes descubrimos estos días en la liturgia que nos pueden ayudar a darnos cuenta, dónde están nuestros cimientos, y hacia dónde dirigimos la mirada cuando nos sentimos zarandear por tantas cosas que nos soliviantan!!... 

La fe nos acerca el misterio para iluminarnos y ayudarnos a vivir... Lo que está en cuestión, para quienes creemos, no es algo irrelevante, ni queda al margen de cada uno de nosotros... estamos siendo amados hasta el extremo, y puede que ni nos esté rozando, al precio que está siendo pagado nuestro propio rescate... Miremos a Jesús enfrentarse al pecado del mundo y reconozcamos qué lleva de nosotros a la cruz, para que curemos en ella nuestra ceguera convirtiéndonos al amor gratuito de Dios, que muere para que no tengamos que morir nosotros para siempre...

"El Señor es la defensa de mí vida, 
¿quién me hará temblar? 

Cuando me asaltan los malvados 
para devorar mi carne, 
ellos, enemigos y adversarios, 
tropiezan y caen. 

Si un ejército acampa contra mí, 
mi corazón no tiembla; 
si me declaran la guerra, 
me siento tranquilo.

Espero gozar de la dicha del Señor 
en el país de la vida.
Espera en el Señor, sé valiente,
 ten ánimo, espera en el Señor" (Salmo 26)...


Pensemos, como cada día, en los enfermos del blog... todos, uno a uno... también sus familias... miremos al cielo suplicantes, pidiendo al Señor que manifieste su poder sobre nosotros por la intercesión del Beato Tito, dando la salud a los que pasan por la senda difícil de la enfermedad, sostenidos por la confianza... Que acojamos la gracia y seamos coherentes con lo que pedimos a Dios, no dejando de lado, lo que también Él nos pide a cada uno de nosotros...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro - Ave María - Gloria...