martes, 22 de septiembre de 2020

"Guíame, Señor, por la senda de tus mandatos"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


La Palabra nos vincula a Jesús, no sólo espiritualmente; es una relación que Jesús equipara a los afectos más inmediatos, y que ha de tener implicaciones objetivas, llevándonos a prolongar su mensaje y sus valores, haciéndoles llegar a todos...

No debe ser por tanto, algo puntual, que hagamos depender de que nos apetezca, de que tengamos ganas... no es una forma de rellenar huecos vacíos, ni algo que hagamos de forma esporádica o circunstancial... no, la escucha de la palabra es vital; en ella, hemos de configurar nuestros intereses, y de ella han de brotar nuestras expectativas... También la Virgen fue discípula de esta misma palabra hasta límites insospechados, que es lo que Jesús mismo alaba, a pesar de que a nosotros nos parezca que la "rebaja", poniéndola a nuestra misma altura, que ciertamente quedamos de ello distante...

Bonito salmo para disponernos a creer, el que nos sirve hoy la liturgia, invitándonos a rezar con la iglesia, dejándonos tocar el alma por estos deseos, disponiendo en nosotros la actitud adecuada para que sea posible...

"Dichoso el que, con vida intachable,
camina en la voluntad del Señor.

Instrúyeme en el camino de tus decretos,
y meditaré tus maravillas. 

Escogí el camino verdadero,
deseé tus mandamientos.

Enséñame a cumplir tu voluntad
y a guardarla de todo corazón. 

Guíame por la senda de tus mandatos,
porque ella es mi gozo. 

Cumpliré sin cesar tu voluntad,
por siempre jamas" (Salmo 118)...


Seguimos mirando al cielo con el corazón en la confianza... recordamos a los enfermos del blog, como cada día, con la suma actualizada además, de infectados y de pérdidas que va haciendo que la situación se siga prolongando de manera preocupante... El cielo nos sostiene en este desconcierto que tantas carencias nos va proporcionando, y debemos acercarnos a la luz de Dios, que de los males nos puede hacer cosechar bienes... Que la oración y la comunión sea el sostén de todos los que están sufriendo, y que nuestra fe se vea cuajada de frutos por la intercesión del Beato Tito, que nos alcance del cielo lo que suplicamos con humildad, insistencia, perseverancia... Dios lo puede todo...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria