jueves, 30 de septiembre de 2021

"Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Jesús mismo nos pone hoy en los labios la oración que quiere recibir el cielo de nosotros, "la mies es abundante, los obreros pocos; rogad pues al dueño de la mies que envíe obreros a su mies"... a la vez, su palabra es para nosotros, "¡poneos en camino! mirad que os mando como corderos en medio de lobos"...

¡¡Si creyéramos a Jesús y diéramos a su palabra espacio en nuestro corazón!!... Recibamos de él el anuncio, y creamos en ello, "el Reino de Dios ha llegado a vosotros"... estamos siendo evangelizados antes de ser enviados a evangelizar...

Recibamos de Jesús la buena noticia que debemos compartir, celebrar, extender a todos... no nos habla Jesús de algo que sabemos; su Palabra es Espíritu, viene de arriba... es preciso abrir el corazón para recibirlo... Recemos el salmo 18, servido hoy en la liturgia, que nos introduce en este misterio de la Revelación, por la Palabra de Dios, y creemos actitudes en nosotros que nos capaciten para que demos fruto en ella...

"La ley del Señor es perfecta
y es descanso del alma;
el precepto del Señor es fiel
e instruye al ignorante. 

Los mandatos del Señor son rectos
y alegran el corazón;
la norma del Señor es límpida
y da luz a los ojos. 

La voluntad del Señor es pura
y eternamente estable;
los mandamientos del Señor son verdaderos
y enteramente justos.

Más preciosos que el oro,
más que el oro fino;
más dulces que la miel
de un panal que destila" (Salmo 18)...


Pensemos, hasta recordar a todos, uno a uno, en los enfermos del blog... también sus familias... Que por la intercesión del Beato Tito sean nuestras súplicas llevadas al cielo, hasta que el cielo derrame sobre nosotros las gracias que imploramos... Que se curen los que están heridos por el dolor de la enfermedad, y que nos convirtamos a la gracia, todos los que creemos que el camino cristiano conduce a la verdad y a la vida verdadera...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria...