domingo, 29 de septiembre de 2019

"Alaba, alma mía, al Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Los oídos de la fe, si los tenemos abiertos, la Palabra de Dios hoy, servida en la liturgia, es un interrogante comprometedor, con que hacer análisis y, hasta, examen de conciencia... Sí, el mundo es más amplio que nuestras cosas, y Dios nos quiere "parte activa" del "TODO" que Él ha creado, y que por nuestra indiferencia y pasividad, tiene que volver a recrear en Jesús, después que el pecado ¡¡sembrado el caos!! nos da multiplicados frutos de muerte, de los que comemos todos, y damos de comer a tantos, contaminando de tantas maneras, nuestra vida, y nuestro entorno... ¡¡Que mal repartimos los seres humanos lo que es de todos y para todos!!... ¡¡Qué paciencia la del Señor con nosotros!!...

No lo olvidemos ¡¡hay un mañana!!... Una vez despertados de nuestras ensoñaciones, despojados de las etiquetas que nos hemos colgado, o dejado colgar, nos veremos ante Dios, todos iguales, sostenidos en la balanza de la misericordia, si la caridad nos eleva a la altura de la dignidad de hijos y hermanos, que recibimos de Dios gratuitamente, y que con nuestras obras, hemos de devolver a él agradecidos... 

Es un tema tan delicado como actual el que nos plantea hoy Jesús en el evangelio, sin olvidar el preámbulo que el profeta nos ha mostrado ya en la primera lectura... es un tema objetivo que tenemos delante, y que debemos mirar atentos, porque a todos se nos pide algo, a cambio de lo mucho que se nos da generosamente... Qué bonita es la alabanza cuando se llena de contenido en la misma historia que vivimos, y que hemos de construir a la luz de la verdad, que Dios en su paciencia acerca cada día a nosotros, para que iluminados, actuemos de forma coherente... Recemos el salmo 145, que alimentará nuestra fe y la crecerá...

"El Señor mantiene su fidelidad perpetuamente,
hace justicia a los oprimidos,
da pan a los hambrientos.
El Señor liberta a los cautivos.

El Señor abre los ojos al ciego,
Señor endereza a los que ya se doblan,
el Señor ama a los justos.
El Señor guarda a los peregrinos. 

 Sustenta al huérfano y a la viuda
y trastorna el camino de los malvados.
El Señor reina eternamente,
tu Dios,
Sión, de edad en edad" (Salmo 145)...


Confiando hacemos acto de fe, y la fe enciende en nosotros la esperanza, que nos facilita seguir dando pasos aunque las sombras oscurezcan el camino... Pensamos, como cada día hasta recordar a todos, en los enfermos del blog... uno a uno... también sus familias... -incorporamos a Lorena, enferma de leucemia, madre de dos hijos, y necesitada de apoyo para seguir luchando, alumbrando su dolor en la esperanza de la fe... Cristina Macías, sigue sostenida en nuestra comunión, como los suyos, dando sentido al misterio, que Dios dibuja con amor para ellos- ...Miremos de nuevo al cielo y presentemos nuestras súplicas, por la intercesión del Beato Tito, deseosos de ser iluminados, para seguir buscando la paz por la confianza, aunque nos duela el alma... La gracia nos ayuda a vivir con sentido, sin entender, pero seguros de que no vamos solos, y de que hay luz en el horizonte abierto por el que avanzamos... La comunión nos permite sentir cómo Dios se acerca a nosotros en los hermanos, y al compartir estos dones, sentimos consuelo, fortaleza; renovamos la confianza y descansamos en su paz...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …