sábado, 2 de enero de 2021

"Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Caminar de manos de la liturgia nos introduce en el camino insondable de la sabiduría, y nos permite conocer a Dios, gustar de Él, saborear sus dones, cobijarnos en su poder... Dios está entre nosotros y desconocemos los signos de su presencia, el eco de su voz, el movimiento de los hilos con que teje la historia pintando el mundo de su amor...

La pandemia, las crisis sociales, los cambios de color políticos, pueden movernos de sitio, balancearnos entre lo mucho y lo poco, el tener o carecer, sufrir o gozar; pero lo que cambia de raíz del rumbo de la historia es la gracia de Belén que terminará en el triunfo de este niño sobre el mal y la muerte, dándonos por gracia la Vida eterna, liberándonos del mal y lo que lo genera, por la fuerza transformadora del amor...

Quien nos ama de veras es Dios, y lo que nos salva de veras es su Voluntad, que pasa por toda la realidad terrena, herida por el mal muy profundamente, pero nada es eterno más que el amor, y Dios es AMOR, sólo y todo AMOR... Demos cabida a la gracia y hagamos camino a Belén, a llenarnos de sus dones...

Cantad al Señor un cántico nuevo, 
porque ha hecho maravillas: 
su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. 

El Señor da a conocer su victoria, 
revela a las naciones su justicia: 
se acordó de su misericordia y su fidelidad 
en favor de la casa de Israel. 

Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. 
Aclama al Señor, tierra entera;
gritad, vitoread, tocad" (Salmo 97)...


Todos necesitamos la misericordia de Dios para dar pasos acertados... miremos al cielo y pidamos ser iluminados por el don de Dios que necesitamos para vivir con acierto la sorpresa de cada día... Pensemos y recordemos a los enfermos del blog... todos, uno a uno... también sus familias... Que las dificultades del momento presente no nos nublen el horizonte ni nos roben la esperanza, sino que mirando a Jesús, sepamos descubrir su presencia y dejarnos acunar en su amor infinito... La intercesión del Beato Tito eleva nuestras súplicas al cielo, presentándolas a la Virgen Madre y a su Hijo Jesús... 
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria