domingo, 1 de octubre de 2017

"perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos..."


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


"Perdona nuestras ofensas, como nosotros perdonamos, a los que nos ofenden"...

Avanza Jesús muy de prisa enseñándonos a rezar y nos lleva muy lejos... nos hace a nosotros determinar, hasta dónde permitimos, que la gracia nos penetre y nos trasforme, cuestionando nuestras actitudes...

Jesús quiere que nuestra conciencia de pecadores sea sentida en la presencia de Dios y la puntualiza, impulsándonos a pedir perdón... vivimos separados de la raíz... cerrados al amor... dominados por el egoísmo... y los frutos que nacen de estas actitudes, no son los dibujados en el perfil proclamado por Jesús, donde tiene que reflejarse el hijo de Dios... 


Cuando nos acercamos a esta luz y somos iluminados, vemos nuestras opacidades y sentimos el sabor de nuestra ingratitud... ¡¡dolor de los pecados!! ¡¡necesidad de pedir perdón!!... somos entonces amados y perdonados en el desborde del amor, que mana de la fuente misma de la Vida... ¡¡Dios siempre dispuesto al perdón y la misericordia!!...

Ciertamente tiene que partir de esta conciencia de ser amados gratuitamente... sin méritos...  sin merecerlo, lo que nos despierte el impulso de decidirnos a perdonar... que es ofrecer el mismo amor que hemos recibido, al pedir nosotros perdón... por eso, separados de la raíz, es imposible, hacer brotar frutos de vida, de nuestra propia rama... los sarmientos, solo unidos a la vid, florecen y fructifican...


Pidamos perdón a Dios, dispuestos a no negar el nuestro a los hermanos... agradezcamos el perdón de Dios, ofreciendo el nuestro a los hermanos... es la dinámica propia de cualquier relación, si somos realistas... sinceros... honestos... todos necesitamos ayuda para crecer... comprensión para rectificar... paciencia para afrontar nuestras equivocaciones... ¡¡no seamos remisos en ofrecerla!!... seamos coherentes y humildes para aceptarnos como somos, mientras avanzamos, dirección al bien... la verdad... la virtud... el amor...

El cristiano tiene que rezar el padrenuestro, dando a cada palabra, su sentido más profundo... veraz... vital... nosotros queremos esa dirección para nuestra relación con Dios, nuestro Padre... para nosotros y nuestros hermanos, con los que vivimos la comunión más de cerca... es Jesús quien nos está enseñando a rezar y tenemos que escuchar de Él cada palabra que hacemos nuestra y la dirigimos a Dios... cada uno personalmente... 


Con este telón de fondo, acudamos a nuestra cita diaria y busquémonos unos a otros, hasta que estemos todos... -incorporamos hoy a Juan Ignacio Reales Espina, diagnosticado recientemente de leucemia y necesitado por ello, del impulso de nuestra oración... también apoyemos a Rafaela Cordero, que con tanto interés se une cada día al cuidado de los enfermos del blog sintiéndose tan necesitada, también ella, de apoyo y firmeza para hacer frente a su situación, manteniendo la esperanza y la fuerza de la fe y la confianza-... con el deseo de que todos sean confortados... asistidos por la gracia de Dios... consolados en el dolor... acudamos a la intercesión del Beato Tito y miremos al cielo con el corazón en la paz... Dios es nuestro Padre... Él nos conduce en este "laberinto" que nosotros no dominamos... pero queremos hacer el camino sin dudar... seguros de que viene con nosotros y que vamos hacia Él...en la confianza damos pie y ahí aguardamos la hora de Dios, seguros del amor que nos tiene...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …