jueves, 3 de marzo de 2022

"Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


La Cuaresma es un tiempo de gracia desbordante; Dios quiere salvarnos y nos ofrece gratis su misericordia, en el deseo de que la acojamos y pisemos nuevos caminos que nos ayuden a abrir el corazón a la fe práctica, comprometida... 

Jesús se dirige a Jerusalén de forma inminente, y hemos de ir con él a dejarnos conmover por los acontecimientos que han hecho posible nuestro propio rescate del pecado y la muerte; dará su vida por nosotros... Nos advierte Jesús su destino, y en él plantea de forma clara y directa cómo se conquista la paz verdadera, mostrándonos en sus mismos pasos el sendero abierto a nuestro pisar... un lenguaje ciertamente contrario a las voces aduladoras del mundo llamándonos a engaño, de las que somos presa todos, de tantas maneras...

El camino cristiano nos ilumina el dolor que vivir supone, y nos acerca a los valores permanentes, despertando en nosotros la verdadera esperanza... una esperanza, eso sí, macerada por la realidad, pero anclada con fuerza en su Palabra, capaz de aguardar con paciencia el tesoro que entraña... Cristo ha muerto por nosotros, y morir al pecado es la fuerza que su amor nos alcanza, y en su gracia nos permite elegir su mismo camino, abriendo puertas que derriban los muros de egoísmo, codicia, soberbia, ambición, que el pecado eleva sobre nosotros impidiéndonos avanzar hacia la Vida... Agradezcamos a Dios este tiempo que estrenamos, convirtiéndonos a la gracia, a la fe, a la paz verdadera; miremos a Jesús, no nos defendamos ante él, sólo él puede curarnos el alma enseñándonos el amor, capaz de esperar el cielo para recibir su corona en nuestra misma cabeza... Él es fiel y su amor hasta el extremo ha vencido al pecado, matando la muerte... 

"Dichoso el hombre
que no sigue el consejo de los impíos,
ni entra por la senda de los pecadores,
ni se sienta en la reunión de los cínicos;
sino que su gozo es la ley del Señor,
y medita su ley día y noche. 

Será como un árbol
plantado al borde de la acequia:
da fruto en su sazón
y no se marchitan sus hojas;
y cuanto emprende tiene buen fin. 

No así los impíos, no así;
serán paja que arrebata el viento.
Porque el Señor protege el camino de los justos,
pero el camino de los impíos acaba mal" (Salmo 1)...


Recordemos como cada día a los enfermos del blog... a todos, uno a uno... también sus familias... miremos al cielo pidiendo para todos la salud y la valentía suficiente para querer lo que Dios quiera, por los caminos trazados en su Voluntad... Nos encomendamos a la intercesión del Beato Tito y descansamos el corazón en la confianza.... Dios camina a nuestro lado, viene con nosotros... No nos olvidemos de pedir por la paz, por el fin de esta barbarie, y por los que están sufriendo todo esto en propia carne... 
"confiando en el Señor, no me he desviado"·...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria...