jueves, 7 de marzo de 2019

"Dichoso el hombre que ha puesto su confianza en el Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Nos habla hoy la liturgia de elección, y es Dios mismo quien nos hace la oferta para que acertemos al elegir... la vida, que tiene destino ¡¡no lo olvidemos!!, debe recorrerse por el camino adecuado que conduce a ello; y ¡¡es tan fácil hacer surcos fuera de camino y perdernos en ellos!!, que Dios que lo sabe, alza su voz y nos advierte...

Nos empeñamos en inventarnos vivir, y lo correcto sería dejarnos conducir como aprendiz... la libertad verdadera es un fruto de la acertada elección, muchas veces elegida, que nos amplía las perspectivas y nos eleva la mirada a la realidad, enseñándonos a trascenderla...

La liturgia hoy nos habla de la cruz y de la negación que conlleva el seguimiento de Jesús, maestro de vida... el único que tiene libertad para amarnos hasta el final es Jesús; y sólo quien participe de su mismo amor, podrá amar sin medida, en la desmedida del suyo... Mientras somos pequeños, pobres, débiles, nuestro camino tiene que ser la confianza... ¡¡qué bien lo sabe el salmista!!, y la Iglesia que es madre y maestra, nos invita a rezar, llamando al corazón a despertar a esta actitud, que es efectiva, eficaz y firme para avanzar por el camino del bien que lleva a la vida verdadera...

"Dichoso el hombre
que no sigue el consejo de los impíos,
ni entra por la senda de los pecadores,
ni se sienta en la reunión de los cínicos;
sino que su gozo es la ley del Señor,
y medita su ley día y noche. 

Será como un árbol
plantado al borde de la acequia:
da fruto en su sazón
y no se marchitan sus hojas;
y cuanto emprende tiene buen fin. 

No así los impíos, no así;
serán paja que arrebata el viento.
Porque el Señor protege el camino de los justos,
pero el camino de los impíos acaba mal" (Salmo 1)...


Recordemos, como cada día, a los enfermos del blog... todos, uno a uno... también sus familias... miremos al cielo deseosos de hacer bien el camino de la vida, para encontrarnos de verdad con la voluntad de Dios a fin de que nunca nos salgamos de la confianza... Que la intercesión del Beato Tito nos ayude a suplicar la salud para todos, y un aumento de fe que nos disponga a la conversión sincera...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro - Ave María - Gloria...