sábado, 24 de junio de 2017

"Enséñame Señor tus caminos"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Sumergidos pues de lleno en el Tiempo Ordinario, con la síntesis bien hecha de donde quedamos cimentados y firmes (hemos partido del Misterio Pascual, hasta desembocar en Pentecostés, que vemos del todo perfilado por las bonitas fiestas de la Trinidad, la Eucaristía y la Humanidad de Cristo, simbolizada en el Corazón de Jesús) tenemos todo un itinerario donde tomar impulso cuando vayamos a ser atrapados por la rutina y las prisas...

La vida cristiana es un camino sin retorno, una vez comenzado... y no se puede vivir de manera coherente improvisando cosas sueltas, donde mostramos nuestro interés ante lo que queremos, pero no demostramos valorar lo que significa y cuánto nos va en ello, el tomarnos en serio de qué se trata...

Nos vendría bien desde esta base, repasar las virtudes, teologales y cardinales, que son "los raíles" que van dando talante a la vida interior, y donde de verdad tenemos que empeñar lo mejor de nosotros, yendo detrás de lo que vale de veras... 

Comenzaremos por las virtudes teologales: la fe, la esperanza y la caridad en los días consecutivos, y empalmaremos con las cardinales: prudencia, justicia, fortaleza y templanza... que como podemos caer en la cuenta, algo de esto nos ha ido saliendo al acercarnos a los dones y frutos del Espíritu Santo... lo miraremos ahora desde otra perspectiva,  para que podamos asumir el reto de dar el salto a este plano que tiene otro color, otro sabor y otro despliegue... Tiene el Señor que enseñarnos a caminar por sus caminos, entrar en sus sendas y encontrarnos con Él, para quedarnos con Él para siempre...


Vamos, como cada día, a centrarnos en nuestra comunión, para atraer gracias que lleguen al corazón de cada uno y cuide la semilla de su fe y de su confianza, para ser valientes y mantenernos en esta ruta que conduce a puerto seguro...

Pensemos en nuestros enfermos, en todos, uno a uno... acudamos a la intercesión del Beato Tito y pongamos en sus manos nuestras súplicas, nuestras preocupaciones, nuestras penas... él las llevará ante la Madre del Señor y el cielo se volcará sobre nosotros, llenando nuestro corazón de paz, consuelo, fortaleza y esperanza... queremos la salud de nuestros enfermos, la del cuerpo y el alma... queremos crecer en la confianza de corazón y no desviarnos de la senda de la Voluntad de Dios, aunque no entendamos y nos cueste mantenernos en ella, por lo arduo del camino... pero seguros de que hay quien nos cuida y nos mantiene... la gracia de Dios... y la intercesión del Beato Tito...

Terminamos hoy dando gracias a Dios porque tenemos noticias de que la pequeña Faustina, la bebé de nuestro blog prematura por un problema de su madre, ha superado los 2 Kg y ya está en casa y fuera de peligro, la madre y ella; por lo que agradecen las oraciones de todos  y dan gracias a Dios, a los peregrinos que hemos rezado por ellas y al Beato por esta gracia...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …