jueves, 10 de junio de 2021

"La gloria del Señor habitará en nuestra tierra"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Va afinando Jesús en el evangelio, al describirnos las actitudes de fondo que definen y dan identidad al cristiano... La fe es rama y raíz, y los frutos maduran en el cuidado de la semilla bien plantada... Dios hace buenos a los hombres, y nos vamos alejando del bien cuando no es Dios la referencia, ni su proyecto nuestro querer...

Un cristiano desvinculado de la gracia no educa el egoísmo, no madura el amor, no acierta con la verdad y el bien, no convive con la justicia que nos hace libres, solidarios, fraternos... Hasta que Dios no nos toca el alma conscientemente, no percibimos su amor y su misericordia, y no nos lanzamos a conquistar el amor, el suyo en nosotros mismos, el único amor que lo puede todo... el egoísmo en cambio vive en la comparación, la competencia, haciendo imposible relacionarnos, entendernos, ayudarnos, amarnos...

Jesús es tajante hoy en su palabra, y, es a nosotros a quien nos habla y nos reta a construir el Reino en el tiempo, haciendo la vida posible mientras vamos de camino al cielo, donde encontraremos el tesoro de vivir en Dios con los demás...

"Voy a escuchar lo que dice el Señor:
«Dios anuncia la paz a su pueblo y a sus amigo».
La salvación está ya cerca de sus fieles,
y la gloria habitará en nuestra tierra.

La misericordia y la fidelidad se encuentran,
la justicia y la paz se besan;
la fidelidad brota de la tierra,
y la justicia mira desde el cielo. 

El Señor nos dará la lluvia,
y nuestra tierra dará su fruto.
La justicia marchará ante él,
la salvación seguirá sus pasos" (Salmo 84)...


Mirando al cielo suplicantes, presentamos todo el dolor del mundo a Dios, para que lo ilumine y lo resuelva... nos acordamos de los enfermos del blog... de todos, uno a uno... también sus familias... pedimos la intercesión del Beato Tito, él nos puede ayudar, y creemos además en el poder de Dios... ¡¡estamos en sus manos!!... que sepamos dar sentido al momento presente y nos cobijemos en la confianza, seguros de que Dios nos sostiene y viene con nosotros... nuestro dolor es su dolor, y todo puede ser para bien, si amamos a Dios y nos dejamos amar en su amor...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria