viernes, 21 de diciembre de 2018

"Aclamad, justos, al Señor; cantadle un cántico nuevo"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


¡¡Qué expresiva es la alabanza y qué creativa!! ... ¡¡qué sugerente al encontrar imágenes con que expresar nuestras "tanteos" cuando nos sentimos sobrepasados sin acertar a decir lo que quisiéramos!!.... La liturgia es experta en su lenguaje para sacar de nosotros todos los sentimientos que Dios merece y que nosotros necesitamos expresar, al alabar, al bendecir, al suplicar, al agradecer...

Estos días previos a la Navidad, el "protagonismo" se va centrando en la Virgen, que permite por su fe, que Dios cumpla su Palabra... y en este contexto, las lecturas, y la misma fe de la Iglesia, reza esperanzada en la voz de los cristianos, dejando resonar agradecidos la confianza...

"Dad gracias al Señor con la cítara,
tocad en su honor el arpa de diez cuerdas;
cantadle un cántico nuevo,
acompañando los vítores con bordones.

 El plan del Señor subsiste por siempre;
los proyectos de su corazón, de edad en edad.
Dichosa la nación cuyo Dios es el Señor,
el pueblo que él se escogió como heredad.

Nosotros aguardamos al Señor:
él es nuestro auxilio y escudo;
con él se alegra nuestro corazón,
en su santo nombre confiamos" (Salmo 32)...


Bueno es que al esperar, nos mantengamos vigilantes con el corazón despierto... en búsqueda y a la espera... cerca unos de otros; mejor, en comunión... ayudándonos a creer, ¡¡si valoráramos lo que vale!!... nos acercaríamos a la gracia "ansiosos"... decidiríamos vivir de ella...

Pensemos y recordemos a los enfermos del blog.... a todos, uno a uno... también sus familias... como cada día, miramos al cielo pidiendo al Señor, por la intercesión del Beato Tito, la salud para todos, y que convertidos a la fe, seamos testigos de las maravillas que Dios hace en nosotros por su misericordia...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro - Ave María - Gloria...