miércoles, 23 de marzo de 2022

"Glorifica al Señor, Jerusalén"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


La liturgia hoy centra la atención en la "LEY", esa palabra que nos crea tanta resistencias, porque la entendemos mal... ¿Sabemos que la ley es la Voluntad de Dios, dictada para nosotros, y que la Voluntad de Dios es la consigna para llegar sanos a la vida?...

¿Nos amenaza un semáforo rojo porque nos avisa que el paso ahora lo tiene quien viene de frente? ... ¿nos amenaza una etiqueta cuando nos informa "tóxico"? ... ¿nos amenaza una zona acordonada avisando "terreno en mal estado"? ... entonces, ¿qué nos pasa cuando es Dios quien habla para contarnos cómo pensó el ser humano, y qué puso en su camino para que la vida fuera fácil, feliz, divertida, cordial; intercalando ¡cómo no! mensajes y avisos de qué debe ser evitado por no ser favorable, conveniente, útil, productivo, y por el contrario podría ser dañino o peligroso?... Los prejuicios creados al bien, y las prevenciones impuestas al único Bueno, es el gran engaño y la mayor mentira de la que tenemos que huir los humanos, o si nos cogió el paso y nos metió en su zurrón, liberarnos a tiempo de ello...

El "susurro" continuo, constante, "misterioso", de la Palabra de Dios, viva y eficaz; ahogado de tantas maneras por el altavoz de la mentira, es como un "venero" que no deja de manar, cuidando el cultivo de la buena semilla del bien, esparcida, por su providencia, cada día, sobre la vida y los vivientes, favoreciendo su crecimiento, entre la cizaña que la pretende ocultar sin éxito, pero con apariencia de conseguirlo... ¡¡el mal está vencido!!, a pesar de que el tiempo nos pretenda hacer creer que no... Seamos testigos de otra realidad más potente, que la que percibimos a lo exterior de todo, y que es el alma que sostiene la raíz, del invierno que la azota... Dios es el dueño de la vida y quien de verdad puede enseñarnos a vivir...


Como cada día, recogidos en el alma, elevemos nuestra mirada al cielo y pidamos por los enfermos del blog... todos, uno a uno... también sus familias... que la intercesión del Beato Tito nos acerque nuevas gracias del cielo, con que podamos ver la gloria de Dios, y convertirnos de corazón a sus caminos, dando testimonio de la fe que nos sostiene y alimenta... no nos olvidemos de la guerra y tanto dolor generado sin justificación posible...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria...