miércoles, 20 de octubre de 2021

"Nuestro auxilio es el nombre del Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Los valores propuestos por Jesús apelan a nuestra responsabilidad, porque cada don bien utilizado, germinará en bendición y gracia de otros muchos dones... somos llamados al Reino, y el reino necesita de nosotros para ser mostrado mientras avanzamos el tiempo, caminando a su encuentro definitivo...

Todos tenemos una encomienda en este proyecto, y es la llamada de Jesús hoy, proclamando una bienaventuranza, que tendría que impulsarnos a tomarnos en serio la espera de ese momento con el que todos hemos de encontrarnos... Las promesas de Dios se realizarán plenamente en el Reino, traspasado el tiempo; no obstante, podemos traer al presente este gracia, de forma incompleta e imperfecta, es verdad, pero real y verdadera... 

Las obras de la luz, alimentadas en la gracia, nos permiten conocer, gustar, y proyectar a Dios mismo entre nosotros, que será lo que hagamos en plenitud, llegados a la otra orilla... Oportuno el salmo 123, que acerca hasta nosotros palabras con que responder al cielo de forma consciente y coherente al don recibido en esta palabra de Dios, viva y eficaz, actualizada hoy por la liturgia...   

"Si el Señor no hubiera estado de nuestra parte
–que lo diga Israel–,
si el Señor no hubiera estado de nuestra parte,
cuando nos asaltaban los hombres,
nos habrían tragado vivos:
tanto ardía su ira contra nosotros. 

Nos habrían arrollado las aguas,
llegándonos el torrente hasta el cuello;
nos habrían llegado hasta el cuello las aguas espumantes.
Bendito el Señor, que no nos entregó en presa a sus dientes. 

Hemos salvado la vida,
como un pájaro de la trampa del cazador;
la trampa se rompió, y escapamos.
Nuestro auxilio es el nombre del Señor,
que hizo el cielo y la tierra" (Salmo 123)...


Pensemos, hasta recordar a todos, uno a uno, en los enfermos del blog... también sus familias... Que la intercesión del Beato Tito nos eleve nuestras súplicas al cielo, hasta que el cielo derrame sobre nosotros las gracias que imploramos... Que se curen los que están heridos por el dolor de la enfermedad, y que nos convirtamos a la gracia, todos los que creemos que el camino cristiano conduce a la verdad y a la vida verdadera...
"confiando en el Señor, no me he desviado"... 

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria...