domingo, 13 de agosto de 2017

"La avaricia"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Hay potro vicio, raíz de otros muchos males, que debemos conocer para detectar su influencia en nosotros... hablamos de la AVARICIA, sinónimo de la codicia, la ambición, el egoísmo... que de manera sutil van ganándonos terreno y nos van encerrando en su cerca, condicionando del todo nuestra libertad...

Esta herida, tan fácil de abrir en el ser humano, no nos hace felices ¡¡no!! tiene una apariencia bien distinta de su verdadera identidad y no sólo no nos aporta nada, sino que invade nuestro terreno dejándonos a la intemperie, vulnerables y vacíos...

Reconozcamos nuestra tendencia a caer en estas actitudes... trabajemos la voluntad para ser dueños de nosotros mismos, acercándonos a la verdad, para que tomemos impulso y construyamos el bien, creciéndonos donde Dios nos espera...


Miremos al cielo... reconozcamos nuestra necesidad de Dios y extendamos nuestras manos suplicantes... recordemos a los enfermos del blog... sus familias... a todos, uno a uno... acudamos a la intercesión del Beato Tito, para que por su mediación, la Virgen nos conceda de Jesús, lo que pedimos con fe... queremos la salud de los enfermos y gracia para que el dolor nos madure y aprendamos a caminar sin perder la paz ni la esperanza, fuertes en la confianza de corazón...

El cielo nos socorrerá... aguardamos paciente la hora de Dios...


Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …