jueves, 8 de junio de 2017

el Espíritu Santo es Dios...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!

¡¡Dios es Trinidad!!
- Padre - Hijo - Espíritu Santo -


El Espíritu Santo es Dios...

El amor es germen de vida y Dios en esencia no es más que Amor... "su aliento creador" es esa corriente de amor, que genera su misma existencia Trinitaria y que nosotros definimos con el nombre de Espíritu Santo...

Ese amor es el que ha sido derramado en nuestros corazones, dándonos la identidad de hijos de Dios... un don "inapreciado" -tantas veces por nuestra parte- al que debemos abrirnos... del que debemos vivir... y desde el que debemos expresarnos...

Desde que Jesús marchó al cielo, después de su resurrección, estamos en ese tiempo del Espíritu, donde podemos recuperar el tiempo perdido, acercándonos a esta gracia y disponiéndonos a despertar a esta conciencia, que nos introduce en la Voluntad de Dios y nos permite vivir de manera adecuada a sus objetivos... 


Nos hemos preparado a la fiesta de Pentecostés, desgranando los dones y frutos, con que el Espíritu se proyecta en el alma y los efectos que se provoca en nosotros al recibirlos... vivir desde esta realidad es todo un testimonio de nuestro ser más intimo y una semilla del Reino en el lugar donde nos decidamos a hacerlo presente...

No dejemos de rezar la secuencia al Espíritu Santo, Dios personal que llevamos dentro... dejémonos "conformar" con Él mismo para que los cristianos "destellemos" la luz de donde venimos y hacia la que nos vamos acercando...


Recemos como todos los días por nuestros enfermos... peregrinos de la confianza a la sombra del Beato Tito, que nos acerca a la presencia de la Madre del cielo y a la de su Hijo, en el deseo de que nuestras súplicas sean escuchadas y atendidas por esta fuerza... "Fuerza o Presencia" -que es lo mismo- que fortalece, anima, conforta, enciende la fe, la esperanza, y nos ayuda a crecer la confianza de corazón, dentro de cada uno de nosotros.

Queremos aceptar los planes de Dios, sin escandalizarnos, cuando no entendemos la noche por la que pasamos y tenemos que avanzar en la paciencia de las promesas, que aún hay que "guardar" y "aguardar" en el corazón... pero estamos seguros, porque sabemos de quién nos fiamos... y no vamos a quedar defraudados...


Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …