jueves, 11 de julio de 2019

"Bendigo al Señor en todo momento"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Lección práctica la que trae hasta nosotros hoy la liturgia en el libro de los proverbios... Todo un regalo envuelto en la sencillez de una Palabra que crea, recrea, sana, salva... una perla de gran valor, guardada entre líneas para quien sepa leer, mirar, escuchar... ¡¡cómo en tan pocas palabras se puede decir tanto!!... ojalá acerquemos el oído y el corazón a la enseñanza  y nos dejemos habitar por la sabiduría...

El Señor, que siempre multiplica sus dones al ponerlo en nuestras manos, quiere contar con nosotros... y nosotros no salimos del cálculo y de la retribución a cualquier cosa que hacemos, sin darnos cuenta que hacerla es ya un don, y que en todo lo que hacemos, los primeros beneficios son siempre para nosotros...

El salmista lo ha descubierto y canta al cielo en bendición y alabanza, porque Dios es fiel y nos ama en todo lo creado... La misericordia de Dios cubre como el rocío en la mañana, de extremo a extremo todo cuanto existe, y nosotros somos una parte minúscula de ese universo creado, donde Dios deposita su gracia y su bondad... Entreguémonos al amor y disfrutemos el amor, agradecidos, hasta aprender a amar... 

"Bendigo al Señor en todo momento,
su alabanza está siempre en mi boca;
mi alma se gloría en el Señor:
que los humildes lo escuchen y se alegren. 

Proclamad conmigo la grandeza del Señor,
ensalcemos juntos su nombre.
Contempladlo, y quedaréis radiantes,
vuestro rostro no se avergonzará. 

Gustad y ved qué bueno es el Señor,
dichoso el que se acoge a él.
Venid, hijos, escuchadme:
os instruiré en el temor del Señor. 

Guarda tu lengua del mal,
tus labios de la falsedad;
apártate del mal, obra el bien,
busca la paz y corre tras ella"(Salmo 33)...


En este día, sexto de la novena a la Virgen del Carmen, volvamos a pensar en nuestros enfermos del blog, peregrinos de la confianza, que vamos haciendo caminos de fe, entre la duda y la esperanza... recordamos a todos, uno a uno... también sus familias... Que la intercesión del Beato Tito, carmelita, nos alcance del cielo, la salud para ellos, del cuerpo y del alma... y para todos los que buscamos al Señor, gracias para afinar la percepción y el oído, hasta que nos sintamos tocar el alma, y nos decidamos a adherirnos a su Voluntad, desde el compromiso que conlleva ser cristianos...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …