miércoles, 5 de abril de 2017

"dice Jesús, si pedís algo al Padre en mi nombre, os aseguro que os la dará"...


Beato Tito compuso este precioso poema a Jesucristo... con él demuestra la aceptación gozosa del sufrimiento que le unió al Señor. Llevaba tres semanas en la cárcel de Scheveningen, segunda estación de su particular vía crucis, que duró seis meses y siete días:

Bien amado Jesús, cuando te veo
en mí fijos tus ojos, me recreo.
Mi pobre corazón goza contigo
al verte el más amante y fiel amigo.

El cáliz que preveo de amargura,
beberlo por tu amor mi fe procura.
La vía dolorosa de Tí en pos
es mi único camino para Dios.

El alma me la bañan paz y luz
y es vivo su fulgor, pese a mi cruz.
En tu pecho mi espíritu al entrar,
mi corazón sosiego logra hallar.

Quiero libre vivir la soledad
de esta celda del sol sin claridad.
Si permites que nadie logre hallarme
libre en áureo silencio podré hallarme.

Jamás por verme solo temeré,
pues nunca a Dios más cerca lo tendré,
dígnate, buen Jesús, morar en mi
que mi profunda paz la tengo en Tí.

"Delante de una estampa de Jesús en mi celda" 
 (12-13 febrero 1942)




Cuando rezamos tenemos todas las garantías de ser escuchados... pero la oración es también una escuela, que nos va disponiendo y acercando a la gracia, que permite al Espíritu Santo, ser quien rece en nosotros... y cuando prestamos nuestra voz al Espíritu, la Voluntad de Dios encuentra la acogida necesaria para hacer de nosotros hijos suyos, confiados y dispuestos a dejarnos conducir por sus caminos... San Pablo nos enseña "la tribulación engendra paciencia, la paciencia virtud probada, la virtud probada la esperanza y la esperanza no defrauda, porque el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones, por el Espíritu Santo que nos ha sido dado"...

En la Palabra revelada -es Dios mismo quien nos habla- tenemos todos los medios que necesitamos para hacer el camino de la vida pisando firme... reconociendo esos tramos oscuros, difíciles, donde lo que se impone es el abandono, vamos abriéndonos a la conciencia de estar unidos a la fuente, de donde mana todo "el aliento" para llegar al destino que nos dirigimos...

Es bonito pensar que lo temporal y lo eterno están en la misma línea y que sólo cambiaremos de luz cuando alcancemos el horizonte último... tememos mucho lo desconocido, pero por desconexión con la raíz... como la semilla que estalla en flor en primavera, nos veremos florecer en el corazón de Dios por su misericordia... esa siembra es la que hacemos en el abrazo a la voluntad de Dios, fiándonos de esas manos creadoras que nos van moldeando haciendo frente al cada día... 


Confía peregrino, vamos encaminados... y además unidos... el viento sopla a nuestro favor, aunque zarandee... tenemos cimientos... ánimo...



Nos acogemos a la intercesión del Beato Tito, como cada día, porque creemos en el misterio de la comunión de los santos... es por eso que rezamos también con mucha fe unos por otros... y sentimos destilar gracia desde el cielo al corazón de cada uno de los que miramos cada día hacia arriba esperando ser acunados en nuestro dolor mientras somos socorridos...

Beato Tito, ruega por nosotros...


Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …