martes, 16 de febrero de 2021

"El Señor bendice a su pueblo con la paz"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Montarnos en la barca con Jesús y hacer con Él la travesía de la fe, es una aventura larga, no fácil de manejar si vamos con Jesús pero centrados en nuestras necesidades materiales, sin abrazar nuevas perspectivas que incluyen la trascendencia, pero en lo real y cotidiano, abriéndonos a la Palabra, que Él va sembrando en nosotros, y que hemos de acoger con actitud reverente y orante, acercándonos al misterio de su Voluntad, para dar sentido al tiempo y emplear el presente en la conquista del cielo...

No perdamos la memoria de lo que ya sabemos y hemos visto ¡¡no vivamos subjetivamente la fe!!... abramos el alma al don de Dios, más grande que nosotros, y dejemos las actitudes egoístas que nos impiden la apertura a la gracia, y la coherencia para asumir riesgos a otros niveles más comprometidos...

Atendamos a Jesús que nos alerta, "tened cuidado con la levadura de los fariseos y con la de Herodes"... "¿No acabáis de entender? ¿Tan torpes sois? ¿Para qué os sirven los ojos si no veis, y los oídos si no oís?"... buena sacudida si estamos dispuestos a creer y fiarnos de quien lleva la barca, y a dónde nos lleva en su barca...

"Hijos de Dios, aclamad al Señor,
aclamad la gloria del nombre del Señor,
postraos ante el Señor en el atrio sagrado. 

La voz del Señor sobre las aguas,
el Señor sobre las aguas torrenciales.
La voz del Señor es potente,
la voz del Señor es magnífica. 

El Dios de la gloria ha tronado.
En su templo un grito unánime: «¡Gloria!»
El Señor se sienta por encima del aguacero,
el Señor se sienta como rey eterno" (Salmo 28)... 


Sigamos llamando al cielo, necesitados de la misericordia de Dios, pues nos sentimos vulnerables... pequeños... recordemos, como cada día a los enfermos del blog, peregrinos de la confianza... todos, uno a uno... igualmente los contagiados por la pandemia... también los familiares de todos los que están sufriendo esta hecatombe... Que la intercesión del Beato Tito nos alcance lo que nuestra fe suspira en la fuerza de la comunión de los santos, donde nos apoyamos todos para hacerla más efectiva y eficaz... Cobijémonos en la gracia de Dios y seamos humildes para volver nuestros pasos a sus caminos...
"confiando en el Señor, no me he desviado"... 

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria