lunes, 16 de octubre de 2017

"...Creo en el Espíritu Santo..."


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Son muchas las veces que hemos dicho ya que la fe cristiana es Trinitaria... Estamos ante esa Persona divina, denominada Espíritu Santo, que siendo igual al Padre y al Hijo, tiene sus propios atributos y su particular manera de actuar en las almas, haciendo hijos e hijas de Dios, a los hombres y mujeres de buena voluntad, que acogen el proyecto de Dios, llamado Reino, y están dispuestos a hacerlo posible con su adhesión a esta causa...

Nosotros creemos en el Espíritu Santo... ponemos empeño en acercar el corazón y el alma al susurro de su "aleteo" para que habitados por esta Presencia, lleguemos a dar los frutos que Dios quiere, de cada uno de nosotros...


Afirmar la presencia del Espíritu Santo... su eficacia... su poder... decir, CREO... es permanecer junto a ese "soplo" suave... constante... persistente... que va dando forma... caldeando el pensar... el sentir... el hacer... mientras se esculpe, paso a paso al hijo/hija de Dios, hasta que emerge un testigo de otros valores, de manera sencilla... simple... natural.... como fermento de un mundo nuevo....

El Espíritu Santo nos trabaja si pedimos, disponiéndonos a ello, su luz... imploremos, pues, la Presencia del Espíritu, haciendo actos de fe frecuentes... reafirmando... suplicando... si estamos convencidos de su eficacia... su fuerza.... y traigamos al recuerdo a los hermanos que deseamos acercar a la atracción de esta gracia... 


Un día más y con más seguridad cada vez, acudimos a la cita con todos los que cada día rezamos en comunión, presentando al cielo intenciones muy concretas... desde la intercesión del Beato Tito, queremos recibir la salud de todos los enfermos del blog... la del cuerpo y también la del alma... el Espíritu Santo que con su acción nos santifica, puede ayudarnos a incorporar a nuestro vivir de cada día, actitudes coherentes con la fe que profesamos...  merece la pena que elevemos la mirada en lo cotidiano y seamos capaces de ver más, que lo que los ojos nos ponen delante y la razón nos hace cuestionar... Que sea Dios y su Voluntad la razón de nuestro vivir... diremos entonces, sin miedo, CREO y estaremos afirmando decididamente, todas las verdades que proclamamos y tanto nos enriquecen si le damos cabida dentro de nosotros...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …