miércoles, 17 de mayo de 2017

el fruto del Espíritu es Bondad...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


El Espíritu Santo, que es el latido del corazón de Dios dando vida al mundo, es quien viviendo en el hombre en Gracia, dibuja en su alma, sus mismos atributos, de los que la persona no solo vive, sino que da frutos de vida para los demás...

Uno de esos frutos es "la Bondad", que se derrama de mil maneras, y que donde se expresa se percibe... si los actos de bondad son todos valiosos, la persona que practica la bondad como actitud, abre un camino a su paso, que consigue "generar movimiento" en el ámbito donde se expresa...

Vivir unidos a Dios, de manera que su bondad se canalice a través de nosotros, es un don que acerca el Reino a nuestra vida de cada día y nos introduce en el camino recto y seguro de la Voluntad de Dios...

El mejor ejemplo de Bondad lo da, como en todas las cosas, Dios mismo en la persona de Jesús... Él que se Encarnó con el solo proyecto de enseñarnos a vivir como hijos de Dios, no le importó terminar su vida sin que nos hubiéramos enterado... ¡¡¡qué mayor acto de bondad que dejarnos su mismo espíritu en el deseo de que, adaptándose a nuestra pequeñísima capacidad, fuera acompañando nuestras cegueras con su luz y abriéndonos camino a su paso!!!...


Merece la pena que nos acerquemos a esta fuente de vida y acojamos esta gracia, porque el mundo necesita estos frutos que despierten al hombre del letargo del egoísmo y le pongan en marcha en la conquista del don de Dios...

Peregrino de la confianza, la Bondad de Dios habita dentro de nosotros para consuelo nuestro... podemos desde dentro de esta realidad, desplegar estos valores y cuestionar a quienes no han descubierto esta llamada, que late sorda en el corazón de cada uno...



Pidamos unos por otros... la oración cura, despierta, empuja, acerca... y la oración contiene para nosotros lo que de verdad nos hace falta...  

Recordemos a nuestro enfermos, todos, ¡¡son muchos!! pidamos la intercesión del Beato Tito y aunemos nuestras suplicas en favor de todos... que sientan consuelo, fortaleza, confianza y paz en la oscuridad de la fe.... y que recuperen la salud... Que la Virgen ampare esta espera, e ilumine la lucha de cada uno...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria …