sábado, 12 de marzo de 2022

"Dichoso el que camina en la voluntad del Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Se hila muy fino si nuestro vínculo a la fe es la relación con Jesús... Ahora que tenemos la barbarie de la guerra ante los ojos y escuchamos a Jesús hablarnos de amor a los enemigos, ¿qué encontramos dentro de nosotros? ¿cómo estamos viviendo de cara a Dios este trágico momento que cada vez vemos acercarse más a nosotros?... XXI siglos de historia que, parece mentira, nos vuelven a situar al principio... parece que somos principiantes, que hemos salido hoy al mundo y pisamos, sin saber dónde nos lleva, terrenos que no son transitables y que hacen camino contrario al destino que vamos...

La palabra de Jesús hoy, es un anuncio y una denuncia, que hemos de acoger y darle forma en nosotros objetivamente... el cambio de rumbo del mundo que vivimos es producto de los "haberes" de todos los seres humanos, que vamos colmando hasta rebosar, y que deshumanizan lo más noble que el ser humano lleva dentro de sí...

Escuchemos a Jesús, pidamos perdón a Dios, y hagamos cuaresma... volvamos al Señor, recemos el salmo 118 agradeciendo la bondad y la misericordia de Dios que nos saca de la muerte a precio de su propia sangre, y pedagógicamente nos instruye en sus caminos... en su perdón nos enseña a perdonar, y en su amor, quiere que nos amemos...

"Dichoso el que, con vida intachable,
camina en la ley del Señor;
dichoso el que, guardando sus preceptos,
lo busca de todo corazón. 

Tú promulgas tus mandatos
para que se observen exactamente.
Ojalá esté firme mi camino,
para cumplir tus decretos. 

Te alabaré con sincero corazón
cuando aprenda tus justos mandamientos.
Quiero guardar tus decretos exactamente,
tú no me abandones" (Salmo 118)...


Apoyemos nuestra fe, unos en otros y miremos al cielo confiados... recordemos a los enfermos del blog... a todos, uno a uno... también sus familias... imploremos la intercesión del Beato Tito y pongamos en común nuestras intenciones... Que nuestro camino de fe se fortalezca en las enseñanzas de Jesús y seamos hombres y mujeres de esperanza, solidarios con los últimos... que Dios conceda la salud a los enfermos para que la gloria de Dios se refleje en nuestro ser y actuar... No nos olvidemos de pedir por la guerra y por todo lo que va derivando de esta locura... un nuevo éxodo sin rumbo, lleno de dolor, de incertidumbre y de terror para tantos... que Dios acoja también en su misericordia, las almas que han llegado a su presencia...
"Confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria...