lunes, 6 de mayo de 2019

"Dichoso el que camina en la voluntad del Señor"...



 Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Hay bienaventuranzas en la escritura, que nos salen al paso de forma inadvertida, y resultan ser como faros que asoman a alumbrar nuestro pisar por el tiempo, para que nuestros pasos avancen dirección a la vida, ya que no siempre pisamos sendas que conducen, haciendo camino...

La liturgia en el evangelio de la misa de hoy nos vuelve a remitir a los discursos de Jesús cuando instruía a los suyos; y bien merece que volvamos también nosotros allí, escuchemos, y nos responsabilicemos, dando a esa palabra el respeto que merece y la acogida que espera de nosotros; porque el intento es de alimentarnos la fe y fortalecernos para vivirla manteniendo el timón mientras otras seducciones nos intentan cambiar de rumbo, mostrándonos otros senderos, que parecen y que no son... "trabajad, dice Jesús, no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura para la vida eterna, el que os dará el Hijo del hombre"... y ésto con la sola ley de creer en Él, que es quien de verdad nos puede permitir realizarlo...

Su Palabra no puede resonar en nosotros como cualquier otra voz que hace ruido... la autoridad a su Palabra se la da su triunfo sobre la muerte, ¡¡ése es su señorío sobre todo y sobre todos!!... ¡¡ojalá se nos abran los ojos del alma y demos un paso al frente decidiéndonos a seguir por sus senderos, agradeciendo de forma coherente el precio a que le hicimos pagar nuestro rescate... 

Seamos bienaventurados pisando firme en su ley, ¡¡sólo se nos pide creer!!... Bien escogido por la liturgia los versículos que nos ofrece el salmo 118, para rezar hoy en comunión con tantos cristianos que se alimentan de la Palabra en la fuerza eficaz de la liturgia... Comamos siempre de esta mesa bien servida, y traigamos a muchos a comer de ella, fortaleciendo nuestra vulnerable voluntad, tantas veces manipulada por otras fuerzas y vientos...

"Aunque los nobles se sienten a murmurar de mí,
tu siervo medita tus decretos;
tus preceptos son mi delicia,
tus enseñanzas son mis consejeros. 

Te expliqué mi camino, y me escuchaste:
enséñame tus mandamientos;
instrúyeme en el camino de tus mandatos,
y meditaré tus maravillas. 

Apártame del camino falso,
y dame la gracia de tu ley;
escogí el camino verdadero,
deseé tus mandamientos" (Salmo 118)...


Con el recuerdo en los enfermos del blog... pensemos en todos, uno a uno... también sus familias... que la intercesión del Beato Tito nos acerque las súplicas al poder de Dios y su gloria brille en cada uno, dando frutos a nuestra fe, haciendo coincidir su Voluntad con nuestros deseos, a fin de que nos convirtamos de corazón a la gracia y no nos salgamos nunca de sus caminos...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro - Ave María - Gloria...