martes, 21 de enero de 2020

"Encontré a David, mi siervo"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!

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La primera lectura de la misa de hoy nos revela un principio que conviene tener en cuenta a la hora de hacer juicios y sacar conclusiones, "la mirada de Dios no es como la mirada del hombre, pues el hombre mira las apariencias, pero el Señor mira el corazón"... Nos solemos plantear las cosas con perspectivas reducidas a nosotros y lo nuestro, y elaboramos nuestra propia escala de valores caprichosamente, sin darnos cuenta que la realidad se construye con otros criterios y para otros fines...

No entramos por inercia en los planes de Dios a pesar de venir a la vida incluidos en ellos... el don es gratuito; no obstante, tras su hallazgo hemos de adherirnos a él libremente para permitir en nosotros su eficacia... También podemos negarnos, lo revela hoy la escritura en el actuar de Saúl, y si seguimos de cerca la historia hasta el final, podemos observar las consecuencias negativas que derivan de sus torcidas decisiones...

Volvemos a ver de nuevo en el evangelio a los fariseos poner en entredicho, una vez más, el actuar de Jesús con los suyos, generando discordia sin argumentos válidos... El criterio marcado por Jesús en respuesta a sus discrepancias puede iluminarnos también a nosotros a la hora da acertar en nuestras opciones eligiendo lo que Dios quiere pero con el sentido común suficiente, de saber qué es relativo, y qué es esencial, "«El sábado se hizo para el hombre y no el hombre para el sábado; así que el Hijo del hombre es señor también del sábado»"... Busquemos nuestro lugar en la vida, y en el proyecto de Dios, y seamos coherentes con la misión encomendada...

"Un día hablaste en visión a tus amigos:

«He ceñido la corona a un héroe,
he levantado a un soldado sobre el pueblo».

«Encontré a David, mi siervo,
y lo he ungido con óleo sagrado;
para que mi mano esté siempre con él
y mi brazo lo haga valeroso».

«Él me invocará: "Tú eres mi padre,
mi Dios, mi Roca salvadora";
y yo lo nombraré mi primogénito,
excelso entre los reyes de la tierra»" (Salmo 88)...


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Miremos al cielo confiados, y amparándonos en la intercesión del Beato Tito, presentemos a los enfermos del blog... a todos, uno a uno... también sus familias...  que la gracia nos asista en este camino duro y difícil por el que pasamos, y desde nuestra fe humilde, constante, insistente, perseverante, nos sea concedida la salud para ellos, con el consuelo, la fortaleza, la paciencia y la esperanza, para mantenernos firmes, dando a Dios un voto de confianza... Él es fiel, y nos ama...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.


Padrenuestro – Ave María – Gloria …