miércoles, 23 de septiembre de 2020

"Lámpara es tu palabra para mis pasos, Señor"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Son muchas las adherencias que hemos ido sumando al evangelio; de ahí que hayamos llevado a la utopía, lo que tenia que ser habitual y cotidiano... el poder de la fe está en función de sus mismos objetivos, por eso, es tan importante conocer los fundamentos sobre los que la vida se sostiene, e incorporar a lo real, el "sexto sentido", que nos despierte al don de Dios, que tan cerca está de nosotros, y tanto necesitamos de él...

Jesús enseña sabiduría en su Palabra dejándonos impresa en ella un horizonte de esperanza... no obstante, esta Palabra que él nos entrega gratuitamente, necesita actitud para la escucha, porque esta Palabra es la vez acontecimiento, es proyecto, es promesa, es salvación... 

Entreguemos nuestras resistencias a la confianza y entremos en los caminos de Dios, decididos, seguros, firmes... Permitamos a la Palabra pintar su perfil en nosotros, disponiéndonos a la acogida del don que Dios en ella revela... nos puede ayudar hoy, de manos de la liturgia, la súplica sugerida  en el salmo 118, que reza la iglesia y nos convoca a rezar con ella...

"Apártame del camino falso,
y dame la gracia de tu voluntad. 

Más estimo yo los preceptos de tu boca
que miles de monedas de oro y plata. 

Tu palabra, Señor, es eterna,
más estable que el cielo.

Aparto mi pie de toda senda mala,
para guardar tu palabra. 

Considero tus decretos,
y odio el camino de la mentira. 

Detesto y aborrezco la mentira,
y amo tu voluntad" (Salmo 118)...


Pensando, como cada día, en todos y cada uno de los enfermos del blog... también sus familias... los que padecen Covid 19... sus familias... los que se han marchado de forma imprevista por esta catástrofe... sus familias... sumando, cómo no, a los que están entregados a esta causa, exponiendo la vida de forma tan humana y heroica, que sin duda son un testimonio con mucho eco... pedimos la intercesión del Beato Tito, y esperamos del cielo, gracias actuales que nos ayuden a dar frutos a nuestra fe... Creamos que es momento oportuno para la fe, coherente, comprometida, práctica... tenemos que incorporar a Dios a nuestro vivir cotidiano, y desandar los caminos que nos alejan de su gracia y su misericordia...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria