sábado, 17 de abril de 2021

"Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


La presencia del resucitado se esconde a lo sensible, no porque no sea visible; todos los discípulos antes de dar el paso a la fe pascual, hablaron con el resucitado sin reconocerle... entonces ¿era o no era Jesús?... Ciertamente lo era, pero no fueron capaces de reconocerle hasta que unieron su mirada al eco de su Palabra... porque la fe, eleva la percepción por encima de lo temporal...

El tiempo, una vez vencida la muerte por la resurrección del Señor, no puede ser nuestra referencia absoluta, ni el espacio donde construir ideales infinitos ¡¡no nos engañemos!!, el ser humano es eterno, pero es criatura... es la soberbia quien nos hace creer que somos Dios, y ahí embotamos la mente y el corazón, llevando el mundo al caos...

Reconozcamos al Señor entre nosotros, y recibamos de él la paz... las tempestades se suceden pero su Palabra tiene que llevarnos a puerto... recemos con fe el salmo 33, servido en la liturgia y creamos en su Victoria... Él Vive y nos llama a la Vida...

"Aclamad, justos, al Señor,
que merece la alabanza de los buenos.
Dad gracias al Señor con la cítara,
tocad en su honor el arpa de diez cuerdas.

La palabra del Señor es sincera,
y todas sus acciones son leales;
él ama la justicia y el derecho,
y su misericordia llena la tierra. 

Los ojos del Señor están puestos en quien lo teme,
en los que esperan su misericordia,
para librar sus vidas de la muerte
y reanimarlos en tiempo de hambre" (Salmo 33)...


Tenemos que seguir ayudándonos a sostenernos en la fe, con la oración de todos, todos los días... Pensemos, hasta estar todos presentes, en los enfermos del blog... uno a uno... también sus familias... Que la intercesión del Beato Tito, nos alcance del cielo lo que pedimos con fe y confianza, y todos demos un paso firme a la coherencia de la fe, que tan nublado nos presenta también el horizonte, ya que el impulso es a ir contracorriente, haciendo presente valores que han pasado de moda, pero que son los que necesitamos para hacer camino veraz y verdadero...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María – Gloria