viernes, 20 de abril de 2018

"Yo soy el pan vivo bajado del cielo"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


"Yo soy el pan vivo bajado del cielo; 
el que come de este pan vivirá para siempre. 
Y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo". 
Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. 
El que come de este pan, vivirá para siempre" (Jn. 6, 51-58).

Tenemos que ser capaces de escuchar estas Palabras de Jesús en primera persona, dichas a cada uno, particular y personalmente; y darnos cuenta que, no está hablando Jesús metafóricamente, haciendo propuestas "surrealistas", buscando seguidores "aventureros" para causas extrañas, ¡¡no!!... Jesús está "desvelando" hasta "revelar" una Verdad Sustantiva, ofertándonos la propuesta de vivir vinculados a Él hasta poder percibir en nosotros su misma vida... la fe, la gracia, el amor, tomarán así forma en nosotros por "relación vital", dándonos consistencia a nuestra persona, y permitiéndonos expresarnos, aportando sus mismos valores, a nuestro pensar y obrar...

Es cierto que la fe es un proceso que resitúa la realidad desde otra vertiente ¡¡la verdadera!!... Todos sabemos que la vida es más de lo que abarcamos nosotros, y de lo que somos capaces de experimentar; de ahí, que pretender negar donde no llegamos, es demostrar que vivimos de espaldas a la luz, o no queremos hacer frente a la realidad prefiriendo el letargo de la comodidad, de la que tantas veces y de tantos modos, somos sacudidos a la fuerza, quedando además aturdidos, despistados, confusos y perdidos...


Nos habla Jesús de la Eucaristía, y nos abre su corazón haciéndonos partícipes de sus dones... quiere compartirnos secretos que afinen nuestra sensibilidad y nos despierten el deseo del cielo... nos incita a invertir en "otro terreno" donde los frutos que nacen no se acaban y no tenemos por ello que vivir amenazados por el tiempo... pero esto no se improvisa... necesitamos dejarnos educar en esta escuela para la vida, que es la vida misma, pero desde este ángulo, que de tantas maneras evadimos por influencias externas, que arrebatan nuestra atención, antes de que el corazón se entere de este pequeño susurro, que quiere conducirnos a la senda cierta por el camino correcto...

Frecuentemos la Eucarística y démonos cuenta que en ello nos va todo... convenzámonos que sólo la gracia alimenta la esperanza y la fe, y pone en acto el amor... Jesús no deja de acercarnos esta luz para que despertemos la conciencia y respondamos... Escuchemos su Palabra y guardemos en el corazón sus consignas, para recibir de Ella misma, la capacidad de sumarnos a sus propuestas e incorporar a nuestra vida  las actitudes que exigen para dar frutos del ciento por uno...


Recordemos a los enfermos del blog... a todos, uno a uno... también a sus familias... y miremos al cielo convencidos de que el cielo nos escucha... Pidamos la intercesión del Beato Tito para presentar nuestras súplicas al Padre, ayudándonos a alcanzar la salud para todos los que se ven envueltos en el misterio del dolor, y sientan, mientras van de camino, el consuelo y la fortaleza que nacen de la esperanza y la fe, por la que podemos habitar siempre en la confianza de corazón... La victoria de Jesús es para ello y nosotros vivimos de esta verdad que vamos creyéndonos de dentro a afuera...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro – Ave María