sábado, 11 de agosto de 2018

"Los Diez Mandamientos no son limitaciones, sino indicaciones para la libertad"...


Oración escrita por el Beato Tito Brandsma el 12-13 de febrero de 1942 
delante de una estampa de Jesús, en la cárcel de Scheveningen.

Cuando te miro, buen Jesús, advierto
en ti el amor del más querido amigo,
y siento que, al amarte yo, consigo
el mayor galardón, el bien más cierto.

Este amor tuyo -bien lo sé- produce
sufrimiento y exige gran coraje;
mas a tu gloria, en este duro viaje,
sólo el camino del dolor conduce.

Feliz en el dolor mi alma se siente:
la Cruz es mi alegría, no mi pena;
es gracia tuya que mi vida llena
y me une a ti, Señor, estrechamente.

Si quieres añadir nuevos dolores
a este viejo dolor que me tortura,
fina muestra serán de tu ternura,
porque a ti me asemejen redentores.

Déjame, mi Señor, en este frío
y en esta soledad, que no me aterra:
a nadie necesito ya en la tierra
en tanto que Tú estés al lado mío.

¡Quédate, mi Jesús! Que, en mi desgracia,
jamás el corazón llore tu ausencia:
¡que todo lo hace fácil tu presencia
y todo lo embelleces con tu gracia!


Los diez mandamientos ¡No son limitaciones, sino indicaciones para la libertad! 
Ellos nos enseñan a evitar la esclavitud 
a la que nos reducen los muchos ídolos que construimos nosotros mismos, 
lo hemos experimentado muchas veces en la historia, 
y lo experimentamos también hoy”.

Los Diez Mandamientos son un “sí al Amor” 

para “defender al ser humano y guiarlo hacia la verdadera libertad”.
“¡Demos confianza a Dios! Confiemos en Él
Los Diez Mandamientos nos muestra el camino a seguir, 
y constituyen una especie de ‘código ético’ 
para construir sociedades justas, a medida del hombre".
La “pobreza material y moral deriva del rechazo de Dios
 y poner en su lugar a tantos ídolos”.
Los Diez Mandamientos,nos enseñan a vivir “el respeto de las personas, 
venciendo la codicia de poder, de posesión, de dinero, 
a ser honestos y sinceros en nuestras relaciones, 
a cuidar toda la creación, a fomentar ideales altos, nobles, espirituales".
"Los Diez Mandamientos no son un himno al "no", sino al "sí". 
Un "sí" a Dios; el "sí" al Amor… 
y porque yo digo "sí" al Amor, yo digo "no" a no Amor. 
Pero el "no" es una consecuencia del "sí", que viene de Dios y nos hace amar.
¡Redescubramos y vivamos las Diez Palabras de Dios! 
Digamos "sí" a estos "diez caminos de amor, perfeccionados por Cristo, 
para defender al hombre y guiarlo a la verdadera libertad".
-Papa francisco-


El ser humano ha corrido tanto alejándose de sí mismo, que nos parece que hacer camino de vuelta, es perder algo ¡¡esa es la trampa!! ¡¡qué bien lo sabe el Papa!!... sólo por el giro acertado de su vocabulario, ya nos atrae la escucha de su propuesta ¡¡qué buen maestro!! y ¡¡qué buena noticia!!... y resulta ser la misma que la Iglesia no ha dejado nunca de proclamar y a la que solemos todos hacer oídos sordos porque nos parece que la libertad es dirigirnos nosotros, a nosotros mismos, a la voz de las ganas, el gusto, lo cómodo y lo fácil... y cómo sin complejos, nos alza la voz el Papa y en tono puramente afirmativo nos alerta de la verdad y nos llama bondadosamente a ella...

Si prestamos atención, escuchamos, y acogemos la luz que nos intenta acercar el Papa, podemos ir dando contenido sólido a nuestros principios, que tanto nos ayudará para encaminar nuestros pasos al bien, y nuestras acciones a los frutos del amor verdadero... 


Escuchemos entonces y descubramos a la vez, que ya Dios nos lo ha dejado impreso a cada uno dentro de nosotros, lo mismo que nos están queriendo decir desde fuera, es cuestión de acercar la atención y dejarnos conducir con actitud dócil de asumir el reto de ser todo lo libre que nos quiso crear el Señor y que tan desorientados nos consiguió dejar la seducción de otras voces, que sin tener poder sobre nosotros, son las que nos dominan de veras...

Sigamos ayudándonos con la oración unos a otros, y no dejemos de rezar por los más vulnerables, que por pasar peores momentos necesitan más de la gracia y de la fortaleza que emana de la comunión de los santos, a la que nos acogemos todos por su eficacia... Pensemos entonces, hasta recordar a todos, en los enfermos del blog, uno a uno... también sus familias... -incorporamos hoy a María Rosa Tamaño Jiménez, embarazada de cuatro meses y diagnostica de cáncer de mama, y que nos piden ayuda para que el cielo resuelva esta situación, y ella pueda enfrentarse a esta lucha, apoyada de forma decidida en la fe y l confianza... pedimos también por Rafael Cordero en estos momento difíciles y agradecemos la mejoría de Julián- ...Ayudándonos de la intercesión del Beato Tito, rezamos seguros de que Dios puede hacer cuanto pedimos, y que nuestros enfermos pueden recuperar la salud para gloria de Dios y bien espiritual de todos los que queremos ser verdaderos cristianos, iluminando el mundo con la verdadera luz que alumbra...
"confiando en el Señor, no me he desviado"...

Beato Tito, ruega por nosotros...

Señor Dios nuestro amante de la vida y de la libertad, que guiaste a tu siervo Tito a través de la noche oscura del sufrimiento, concediéndole una constancia invicta en las persecuciones. Te doy gracias por haber glorificado en la iglesia a tu humilde siervo el Beato Tito Brandsma; haz que su ejemplo suscite en muchas almas, renovadas interiormente por la fuerza de tu Espíritu, el compromiso de trabajar por la defensa de la Verdad, rehusando a todo compromiso con el error, y así lograr la verdadera libertad de los hijos de Dios. Concédenos la gracia de su canonización y el favor que te pedimos por su intercesión. Amen.

Padrenuestro - Ave María - Gloria...

3 comentarios:



  1. "LOS DIEZ MANDAMIENTOS NO SON LIMITACIONES, SINO INDICACIONES PARA LA LIBERTAD”...

    ¿Podemos pensar que Dios nos coarta la libertad al darnos ls diez Mandamientos, como normas de vida cristiana? Nos dice el Papa Francisco que todo lo contrario, que están hechos por amor y para el amor entre los hombres y entre los hombres y Dios. Eso nos da unas normas de vida, que son verdadera libertad para la convivencia, que aunque están referidas al cristiano, bien podría servir para cualquier sociedad o comunidad que desee vivir en paz y en donde prima la persona y la vida por encima de cualquier otra circunstancia.

    Los Mandamientos de la Ley de Dios, están manufacturados a nuestra medida, por quien nos conoce mucho mejor que nosotros mismos. Están hechos con el amor de un Padre que desea lo mejor para sus hijos, algo que no debemos dudar nunca y que ya hemos dicho el porqué en muchas ocasiones. Son normas para convivir cristianamente y para salvarnos de la muerte y ganar la vida eterna. Con ellos se nos enseña a amar a Dios y cumplir con sus preceptos, a amar a nuestros padres, hermanos, esposas e hijos, a vivir con la verdad, a respetar la propiedad de los demás, a amar al ser humano como hijo de Dios y hermano en Cristo Resucitado, a respetar la vida como un don de Dios sobre la que no tenemos ningún derecho, excepto vivirla, y nos enseña que la caridad es esencial en nuestras vidas si verdaderamente amamos a Dios y queremos salvarnos.

    Somos libre de elegir que hacer y no hacer, pero seremos mucho más libres en el amor que en el odio, en la bondad que en la ira, en la generosidad que en la envidia... en definitiva, elijamos la felicidad y la única verdad antes que a aquellos ídolos de nuestros días que lo que hacen es esclavizarnos el pensamiento, la vida y el alma: el dinero, el poder, el engaño, el fraude... Amar a Dios no esclaviza, todo lo contrario, libera de la infelicidad que nos provoca alejarnos de la fe y de la Caridad, apartándonos irremediablemente de la Esperanza de la salvación.

    Cumplamos, como nos dice su S.S., según nuestras posibilidades pero con fe en la Resurrección, en libertad, pero con conocimiento de la Palabra. El Espíritu Santo está con nosotros, dejemos que nos guíe y nos llevará directo al Padre, a quien pedimos por la salud de nuestros enfermos, en nombre del Hijo, por la intercesión del Beato Tito Brandsma. Recordemos a aquellos que más lo necesitan y a los niños, también a los que estos días hemos nombrado en nuestros ruegos, para que todos sean llevados a los pies de la Cruz por María Santísima Madre de Dios. Amén

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  2. Buenas noches :
    Señor atiende a nuestras súplicas y haznos capaces de aceptar siempre tu voluntad

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